El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) consideró que la inyección de liquidez por 750 mil millones de pesos anunciada por el Banco de México (BdeM) el martes se encuentra en línea con la postura de política monetaria más flexible que han tomado otros bancos centrales para proveer liquidez y mejorar el funcionamiento de los mercados financieros.

Jorge Sánchez Tello, investigador del ITAM, insistió en la necesidad de que la Secretaría de Economía, hasta ahora ausente, ponga en funcionamiento un programa masivo de garantías, conjuntamente con la banca de desarrollo, para las pymes, pues desde antes del Covid-19 la banca comercial cuenta con suficiente liquidez para prestar.

El problema, dijo, es que las Pymes no se acercan al crédito bancario por la falta de garantías colaterales, las altas tasas de interés y la incertidumbre económica, por lo que prefieren financiarse con sus proveedores.

Propuso, adicionalmente, una mayor reducción en la tasa de interés para reactivar la economía, pues hay un gran diferencial entre la inflación y el costo del dinero.

Sólo para términos comparativos, dijo, mientras en México la tasa de interés la redujo el banco central a 6 por ciento, en Estados Unidos es de 0.25 por ciento.

Por otro lado, Carlos Huerta, especialistas en temas fiscales al comentar sobre las recientes medidas anunciadas por el gobierno federal para enfrentar los efectos de la pandemia, en las que también se menciona el apoyo a las pymes, señaló que parece que el gobierno todavía no se da cuenta del tamaño de la crisis.

Planteó la necesidad de hacer uso de la línea de crédito contratada con el Fondo Monetario Internacional a la que puede acceder México.

Acuerdo de fraternidad

“El Estado mexicano deberá endeudarse interna y externamente con un amplio sentido de responsabilidad para cuidar el destino de estos recursos.

Será crucial hacer llegar estos recursos primero a quienes más lo necesitan y paralelamente a las unidades económicas que sostienen a la nación como lo son las micro, pequeñas y medianas empresas a través de diversos estímulos fiscales y apoyos económicos directos.

En tanto, las grandes empresas deberían de ser coadyuvantes del gobierno federal mediante un gran acuerdo nacional de solidaridad y fraternidad económica.

Ambos especialistas estimaron insuficientes las medidas anunciadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, ante el enorme desafío al que se enfrenta el país.