Viernes 3 de abril de 2020, p. 21
Un día después de que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público reconociera una contracción económica que este año podría alcanzar el 3.9 por ciento, bancos internacionales de inversión duplicaron el pronóstico de la dependencia federal.
Inició Bank of America (BofA), que calcula una caída de la actividad económica de 8 por ciento en 2020, para la que ya nombró la peor contracción en la historia reciente
de México. Sólo dos semanas atrás, la misma firma contemplaba una merma de 4.5 por ciento.
Explicó que un estornudo
de la economía de Estados Unidos, cuya recesión tocará 6 por ciento negativo en este año, es el principal factor para el desplome en la mexicana, con un impacto al comercio y remesas.
A ello se suma el bajo precio del petróleo a escala mundial y la declaratoria de emergencia por la pandemia de Covid-19 a inicios de esta semana, según el reporte difundido a inversionistas.
En la misma jornada, Barclay’s también amplió su estimado de contracción a 5 por ciento, de un previo de 2. Advirtió a sus clientes que la falta de apoyos fiscales y el continuo apoyo a Petróleos Mexicanos (Pemex) con un bajo precio del crudo, marcan su pronóstico.
La presión sobre el sistema de salud es el principal riesgo, ya que se desconoce qué tan rápido el virus podría propagarse en el país
y todavía no hay apoyo fiscal (u otras medidas de estabilización) a la vista
, expuso.
Invex, una correduría de bolsa, también pasó su previsión de un marginal avance de 0.9 por ciento, a una contracción de 6 por ciento. El golpe será fuerte
, advirtió, no sólo por el freno en actividades esenciales para el gobierno, sino por una menor demanda global que afectará el comercio exterior del país. En ese sentido, consideró que la mayor afectación recaerá en las industrias, pese a que el comercio también se ve frenado por menos personas en las calles.
El primero de abril Hacienda presentó al Congreso los Precriterios de Política Económica, un documento con las estimaciones macroeconómicas guía para generar la política económica del próximo año. Entre ellas, cómo se pretende recaudar y cómo gastar. En él la dependencia contempla un rango de crecimiento de 0.1 por ciento a -3.9 por ciento.
En otros indicadores, BofA advirtió que al cierre del año el petróleo cerraría en 37 dólares por barril y el tipo de cambio en 25 pesos por dólar. En este escenario la amplia depreciación del peso y el incremento de las tasas de largo plazo limitan el espacio de Banco de México para bajar las tasas
, subrayó, a la par de una estimación de que la referencia baje a 5.5 por ciento este año.
Barclay’s asentó que la inflación no es actualmente un problema
y disminuirá más rápidamente por la falta de demanda, combinado con un menor precio de las gasolinas. Hecho que llevaría a Banco de México a reducir su tasa de interés a 5.5 por ciento –del actual 6.5 por ciento–en los próximos dos meses; hacia septiembre puede llegar a 4.5 por ciento.
En un balance de riesgos, BofA advirtió que el malestar social y la inseguridad se pueden incrementar significativamente más adelante, dañando la economía
, pero el que algunas personas sigan trabajando ayudará a la economía por arriba del pronóstico que tiene BofA, esto siempre que la emergencia de salud no se intensifique
. Para 2021. BofA estima un crecimiento de 4.5 por ciento, Barclay’s de uno por ciento e Invex de 2.5 por ciento.