El impacto que el coronavirus tenga en la economía dependerá de cinco factores: el número de infectados y fallecidos así como la duración del virus, la percepción de riesgo para los inversionistas, los resultados de Estados Unidos, la afectación en servicios y transporte de mercancías y la efectividad de las políticas fiscales que adopte el gobierno, comentó Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base. Precisó que en tiempos de crisis la economía nacional suele tener un peor desempeño que la estadunidense. Sólo en 2009 la actividad en el país vecino cayó 2.5 por ciento, y la nacional 5.03. La crisis actual tiene un choque con la oferta de servicios; mientras en 2009 hubo muchos actores con un patrón particular de comportamiento, pensamos que esta vez sea más grave el caso de México.

Previó que, de seguir las medidas que ha anunciado el gobierno federal, en el segundo trimestre de este año la actividad en el país tendrá retroceso de 7 por ciento.

Estamos en una crisis global a la que México entró con estancamiento económico. Como ya habia desconfianza entre los consumidores y empresas, la caída del producto interno bruto podría ser más severa y duradera, sostuvo.

El coronavirus es un evento sin precedente, por lo que existen un sinfín de posibilidades de impacto económico, aunado a la crisis energética y los riesgos que los inversionistas ven en el país, refirió.