Brasilia. La pandemia de Covid-19 continúa su avance en América Latina con al menos 9 mil casos y unos 125 fallecidos, mientras 13 de los 20 países han optado por aplicar toques de queda y cuarentenas totales, y siete estados llaman a la población a quedarse en casa sin aplicar medidas obligatorias.

A contracorriente, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, electo en 2018 con fuerte apoyo de los cultos evangélicos, eximió ayer a las iglesias de los aislamientos por coronavirus al incluir las actividades religiosas como servicio esencial, que deben permanecer abiertas incluso en los estados que impusieron cuarentenas, atendiendo las solicitudes de los líderes de ese culto.

El decreto, publicado en el Diario Oficial de la Unión, equipara las actividades religiosas de cualquier índole con las farmacias y los supermercados, esenciales para responder a las necesidades cotidianas de la población.

Esa posible limitación saca a los oficios religiosos de la órbita de los estados y municipios, muchos de los cuales impusieron el cierre de escuelas y comercios no esenciales, y recomendaron la suspensión de ceremonias religiosas.

Bolsonaro fustigó esas medidas y acusó a los gobernadores de optar por una política de tierra arrasada que puede resultar ruinosa para el país. Algunas de esas iglesias ya optaron por celebrar oficios a distancia, transmitidos por las redes sociales, con la finalidad de evitar aglomeraciones, que son propicias para la transmisión del Covid-19. Otras congregaciones se oponen al cierre de los centros de culto.

El influyente pastor Silas Malafaia, quien recibió varias veces a Bolsonaro en su templo de Río de Janeiro, atribuyó la semana pasada las medidas contra el Covid-19 a una táctica de Satanás.

Amigo, amiga, no se preocupe con el coronavirus, porque esa es una táctica, o una táctica más, de Satanás. Y Satanás trabaja con el miedo, con el pavor. Trabaja con la duda, afirmó.

En la Iglesia católica, la Confederación Nacional de Obispos de Brasil indicó ayer que la parroquias deber dar preferencia a las misas a distancia.

Hasta el miércoles había 2 mil 433 casos de Covid-19 en Brasil, con 57 decesos. En Sao Paulo los pacientes graves aumentaron 40 por ciento en horas recientes.

Más de 2 mil personas fueron detenidas en Guatemala por violar el toque de queda. En Chile, la cifra de contagios ascendió a mil 306, incluidos 80 funcionarios de salud, y cuatro fallecidos.

En Argentina, también en cuarentena obligatoria, se registraron 502 infectados y entre ellos ocho fallecidos; 49.8 por ciento relacionados con viajes al exterior, informó el Ministerio de Salud.

La cuarentena en el país austral es cumplida por la mayoría, aunque en las grandes ciudades se han multado a los infractores. Al menos mil 709 personas fueron detenidas por no cumplir el aislamiento.

En Colombia, en el primer día de cuarentena obligatoria nacional, fueron multadas 2 mil 11 personas.

En Venezuela, un hombre de 47 años de edad se convirtió en el primer fallecido por Covid-19, informó la vicepresidenta, Delcy Rodríguez.

El paciente padecía neumonía, vivía en el estado Aragua y resultó positivo a la prueba de coronavirus hace tres días, dijo Rodríguez antes de informar que subió a 107 el número de casos confirmados en el país.

La funcionaria apuntó que el fallecido era un paciente que tenía una enfermedad crónica en los pulmones, producto de su actividad laboral, y el caso, que en un principio se trató en un centro privado de salud, se complicó.

Venezuela anunció los primeros casos de contagio el 13 de marzo y dos días después declaró la cuarentena con el propósito de evitar la propagación del virus, en una nación donde la oposición y gremios médicos denuncian fallas de agua y medicinas en hospitales que atienden casos sospechosos.

De los pacientes que se ha comprobado que padecen el coronavirus, Delcy Rodríguez apuntó que hay dos casos graves; seis personas padecen insuficiencia respiratoria moderada y 76 leve, sin ofrecer más detalles.

De acuerdo con el último reporte del gobierno, 31 personas habrían logrado recuperarse.

En tanto, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, sostuvo que su país no está en favor de que Estados Unidos envíe a soldados a la frontera entre ambos países debido a la pandemia,

Pocas personas cruzan ilegalmente la frontera estadunidense desde Canadá y hay más casos de Covid-19 en Estados Unidos que en territorio canadiense.

Canadá reporta 3 mil 409 casos, 35 muertes y ha realizado pruebas a 158 mil personas.