Miércoles 11 de marzo de 2020, p. 5
Mónaco. David Nahmad, multimillonario y coleccionista de arte, no recuerda exactamente por qué compró Nature morte (Naturaleza muerta), encantador y sencillo óleo que Pablo Picasso pintó en 1921.
Como Nahmad posee unas 300 obras del artista, su falta de memoria es comprensible. Con semejante colección de Picasso, que según Nahmad es la más grande del mundo en manos privadas, a veces se pierden los detalles.
‘‘Hemos comprado muchos Picasso, no recuerdo la razón específica”, manifestó Nahmad en una entrevista exclusiva en su lujosa casa en Mónaco. ‘‘Es el cuadro más pequeño que tengo’’, apuntó. Pero no por mucho tiempo. Alguien muy afortunado de algún lugar del mundo, acompañará pronto a Nahmad en el privilegiado club de propietarios de obras del malagueño, cuando Nature morte se rife por una causa benéfica más tarde este mes.
El propietario recibirá un tercio del valor del óleo
Los boletos, que se venden por Internet, cuestan 100 euros (unos 2 mil 370 pesos mexicanos). El ganador de una rifa similar en 2013 fue un joven de 25 años de Pensilvania que trabajaba con sistemas contra incendios.
Nahmad, uno de los galeristas más influyentes, recibirá un millón de euros por la obra, que, dice, vale ‘‘al menos dos, tres veces”.
‘‘Esta rifa no había tenido éxito si el nombre no fuese Picasso. Intenté proponer otros nombres. No funcionaría, porque querían uno que atrajese a todo el mundo. Picasso es el nombre mágico.”