La estrategia de sensibilización Alas para el Cambio, que busca prevenir la violencia en contra de mujeres y niñas, avanza en su puesta en marcha. La acción es desplegada a través del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), donde el viernes se realizó la primera reunión de la segunda etapa del mecanismo, a la cual acudieron representantes de diversas instancias de gobierno.

Hasta el momento están apoyando la difusión de la estrategia más de 90 instancias del gobierno federal, estatal y municipal, así como alrededor de 250 organizaciones sociales.

En la reunión se presentaron propuestas de imagen y contenidos, mismas que tras una revisión y que se les sumen las aportaciones de instancias y organizaciones, irán a un proceso de validación.

Lo que se busca por conducto de Alas para el Cambio es prevenir los hechos de violencia de género dentro de las familias, en las escuelas, en los centros de trabajo, en los espacios públicos y en general en las comunidades.

Alas para el Cambio se inspira en el Plan Nacional de Desarrollo, el cual indica como principio rector de este gobierno la igualdad efectiva y de derechos, se precisa en el documento que describe el esquema.

A la referida reunión asistieron representantes de las secretarías de Gobernación, Salud, Hacienda, Relaciones Exteriores, Cultura, Defensa Nacional y Marina, así como de Inmujeres, Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes y el DIF, entre otros.

La estrategia también se inspira en la Agenda 2030, específicamente en el objetivo número cinco, que se refiere a poner fin a todas las formas de discriminación contra las mujeres y niñas en los ámbitos público y privado.

Alas para el Cambio es una iniciativa inclusiva e incluyente para que cada dependencia, organización social y ciudadanía en general se sume con acciones y propuestas que busquen transformar la percepción social prevaleciente en el país sobre la violencia hacia las mujeres y las niñas.

La iniciativa invita a dejar de ser indiferentes, a superar la apatía y desinterés ante situaciones que pueden derivar en mal trato, discriminación, agresiones y violencias hacia las mujeres y las niñas.

La instrumentación de la acción está contemplada en tres etapas: una de difusión de mensajes orientados a sensibilizar sobre la importancia de que todas y todos podemos hacer la diferencia si actuamos con solidaridad, así como invitar a sumarse a Alas para el Cambio.

Otra en la que se diseñarán mensajes para que la ciudadanía nos diga qué está haciendo, motivar la participación con sugerencias y vivencias, propuestas de acción para prevenir los diferentes tipos de violencia existentes en la familia, escuela, comunidad, trabajo, lugares públicos, y una última relativa a la corresponsabilidad, en la cual se promoverán las acciones coordinadas entre los tres órdenes de gobierno y la sociedad.