Luego de la polémica por la novela American Dirt (Tierra americana), de Jeanine Cummins, la editorial Macmillan se comprometió a incrementar el personal y el número de autores latinos publicados.

Activistas y escritores latinos que impulsan la iniciativa #DignidadLiteraria se reunieron con representantes de la editorial y el sello Flatiron Books luego de casi dos semanas de manifestarse contra la ‘‘comercialización del sufrimiento” en la narración, lo que consideran una ‘‘subrepresentación” de latinos en el ámbito editorial.

Al finalizar la reunión, el escritor David Bowles, cofundador de esa iniciativa, refirió que se trata de una ‘‘clara victoria para nuestra gente”. Destacó que ‘‘sus voces fueron escuchadas, pues se organizaron rápida y orgánicamente en torno a nuestra indignación y decepción por la industria editorial’’.

En un comunicado se difundió que el grupo #DignidadLiterariay la organización activista Presente ‘‘convencieron a los principales ejecutivos y editores de la editorial Macmillan de que contraten a más personal latino y amplíen sustancialmente la cantidad de autores latinos publicados”.

La editorial, según el documento, se comprometió a incrementar de manera sustancial ‘‘la representación latina dentro de Macmillan, incluidos autores, títulos, personal y su ecosistema literario en general”; ‘‘desarrollar un plan de acción para abordar estos objetivos en un plazo de 90 días” y ‘‘reunirse dentro de 30 días con #DignidadLiteraria y otros grupos latinos para evaluar el progreso”.

Intenciones declaradas de dos editoriales

Una encuesta reciente de la industria editorial, elaborada por Lee & Low Books, difundió que de las 7 mil 893 respuestas que recibieron de los empleados de esa rama, 76 por ciento se identificaron como blancos, refirió el diario británico The Guardian.

#DignidadLiteraria y Presente sostienen que ‘‘aprecian las intenciones declaradas” de Macmillan, ‘‘pero el anuncio es sólo el primer paso en lo que finalmente debe ser un cambio radical en la industria editorial’’. Concluyen que ‘‘esta campaña no se trata simplemente de Flatiron Books o Macmillan Estados Unidos. La idea es buscar un cambio que llegue a toda la industria para que los estantes de las librerías y bibliotecas estadunidenses reflejen a su gente”.

El escritor y periodista Roberto Lovato sostuvo que conoce la odisea de ‘‘ser cazado por pandillas, militares y Patrulla Fronteriza desde Honduras, Guatemala, El Salvador, México y Estados Unidos; lo que es ver a los niños que huyen del terror con su tierna piel destrozada por el alambre de púas”.

El cofundador de #DignidadLiteraria añadió: ‘‘No puedo entender cómo un escritor o una gran empresa editorial pueden celebrar el lanzamiento de un libro con centros de mesa hechos para que parezcan alambradas de púas de un muro fronterizo”.