Nairobi. Mientras los plusmarquistas Eliud Kipchoge y Brigid Kosgei liderarán el equipo de maratón de Kenia en los Juegos Olímpicos de Tokio, la World Athletic anunció ayer la prohibición para utilizar prototipos de zapatillas en competición, tras la polémica nacida por un modelo de Nike que ayudó a batir varios récords en los meses recientes.

Kenia es famosa por su poderío en las carreras de media y larga distancia, pero ha enfrentado una serie de casos de dopaje durante los seis años pasados.

Los otros nombres importantes en el equipo masculino son el ganador del maratón de Boston del año pasado Lawrence Cherono y el medallista mundial de maratón Amos Kipruto, así como Vivian Cheruiyot, monarca olímpica y del orbe en 5 mil metros y plata en 10 mil, y Ruth Chepngetich, la actual campeona mundial en los 42.195 kilómetros.

El campeón olímpico Kipchoge, de 35 años, tiene el récord mundial de maratón de 2:01.39 horas, que estableció en Berlín el 16 de septiembre de 2018, en tanto Kosgei ganó el maratón de Chicago en 2018 y 2019, donde realizó la marca del mundo de 2:14.04 horas el año pasado. También ganó el maratón de Londres en 2019, anunció la Federación de Atletismo de Kenia.

Kipchoge bajó de la barrera simbólica de las dos horas, el pasado 12 de octubre en Viena, al recorrer la distancia en 1:59.40. El desafío individual no fue homologado por la Federación Internacional de Atletismo.

En esa ocasión, Kipchoge utilizó los tenis especiales de Nike , por lo que la World Athletics prohibió ser usados en competencias.

Analizan tecnología

Asimismo, el organismo modificó su reglamento sobre las características técnicas de las zapatillas (talla de la suela, número de placas añadidas) y avisa que un panel examinará cualquier nueva tecnología antes de que sea válida para la competición.

El polémico calzado de última generación de Nike abrió un debate para World Athletics, entre una regulación para preservar la igualdad deportiva y la necesidad de desarrollar la innovación.

Por otra parte, el gobierno ruso suspendió por un mes su reconocimiento de la Federación Nacional de Aletismo, aumentado las presiones sobre los funcionarios para que cooperen con investigaciones de cara a la justa de Tokio ante los escándalos de dopaje.