Por los caminos de José Agustín Ramírez
l autor de La tumba cuenta que en alguna ocasión el ya laureado compositor e intérprete José Agustín Ramírez le pidió a su cuñada que, en vista de que él no había tenido hijos, le pusieran su nombre al sobrino que estaba por nacer y así ocurrió. Este es el primer referente que hace José Agustín de su tío en el entrañable prólogo del cancionero que ha seleccionado el musicólogo Pavel Granados, con el patrocinio del gobierno del estado de Guerrero, para rendir homenaje al compositor popular más queridos de aquellos “Caminos del sur…”
Imposible no recordar algunas de las canciones más representativas de llamado dominio público
, como La Sanmarqueña o Linda acapulqueña, pero mucha gente no sabe quién fue su autor y mucho menos conoce la intensa vida magisterial, artística y bohemia del maestro José Agustín Ramírez, de quien nos hace un recuento muy puntual su sobrino, el escritor José Agustín.
Difícil imaginar la gran producción letrística y musical de José Agustín, quien no sólo cantó a la belleza de su tierra, sus mujeres, sus tradiciones y sus parajes más entrañables, sino que también incursionó en el género de himnos y marchas escolares y gremiales. El también escritor y periodista Pavel Granados, titular de la Fonoteca Nacional, es el responsable de hacer la selección de este cancionero, en cuya investigación también trabajó el maestro Alejandro Cisneros. Este libro ya se presentó a finales del año pasado justo en Acapulco, pero el próximo jueves 13 de febrero será comentado nuevamente en la Pulquería Los Insurgentes (Insurgentes 226, colonia Roma), con la presencia del autor, el editor y un grupo musical sorpresa que interpretará aquellas canciones de antaño.
Para una política del texto de José María Espinasa
José María Espinasa es quizá una de las presencias más significativas del panorama literario y cultural mexicano desde la mirada y la voz crítica que no por apasionada y divergente pierde una discreta pulcritud. El recorrido de Espinasa en los terrenos de la edición literaria (baste mencionar su propia editorial Ediciones Sin Nombre), que incluye la publicación de revistas como Nitrato de Plata y suplementos culturales como en el diario La Jornada, no ha impedido un permanente trabajo como crítico literario y ensayista. De ahí la importancia del libro Para una política del texto, que reúne una selección guiada por un orden muy personal que nos da cuenta de sus muy diversas inquietudes literarias. Esta presentación será el jueves 30 de enero a las 5 de la tarde en la sala José Clemente Orozco del Colegio de San Ildefonso (Justo Sierra 16, Centro Histórico), con la presencia de Evodio Escalante, Armando González Torres, Eduardo Vázquez Martín y el autor.
El Festival de Cine de Barrio (Feciba) llega a reclusorios
Ya el año pasado fuimos testigos de la primera edición del Festival de Cine de Barrio (Feciba), que tuvo lugar en el Centro Pluricultural de Ciudad Nezahualcóyotl, estado de México, donde cientos de niños y jóvenes confirmaron la importancia del cine para generar una identidad de barrio. En esta ocasión, este propositivo festival llegará a los reclusorios con proyecciones y talleres de realización cinematográfica. La primera exhibición de un ambicioso programa será el miércoles 5 de febrero en el Reclusorio Oriente y planea recorrer todas las cárceles alrededor de la Ciudad de México.
Presentación de Lesbianario en La Cañita
Debemos reconocer la incansable labor de la diyéi y promotora cultural Ali GuaGua (en complicidad con la escritora Diana Junyent) por reivindicar los derechos de las mujeres y en general de todas las diversidades de género. Con un gran respaldo de la comunidad cultural, su lugar La Cañita (Doctor Andrade 24, colonia Doctores) es punto de reunión de la comunidad artística y de las más diversas identidades de género. El miércoles 5 de febrero a las 19 horas presentan en este espacio: Lesbianario, una autopublicación que explora identidades, tránsitos, canales, anales y otros medios también; presenta su autora, Andrea Fuego.