Morelia, Mich., Autoridades comunales de 52 pueblos originarios de las zonas purépechas de esta entidad acordaron que, mediante asambleas generales, prohibirán el cambio de uso de suelo en sus comunidades porque los productores de aguacate han arrasado con miles de hectáreas de bosques, informó el vocero del Consejo Supremo Indígena de Michoacán, Pável Guzmán.

Hay conciencia del daño que causa el cultivo de aguacate. Las autoridades comunales saben perfectamente que nos estamos quedando sin agua y con miles de hectáreas de tierra erosionada, apuntó el dirigente purépecha.

Dijo que hay casos lamentables, como el del lago de Zirahuén, municipio de Salvador Escalante, que después de ser sustentable y estar rodeado de un bosque tupido, ahora está invadido de huertas de aguacate y los agroquímicos que utilizan los productores están contaminando las aguas.

Pável Guzmán comentó que durante el tercer Congreso Estatal Indígena, realizado los días 25 y 26 de enero en la comunidad de Jucutacato, municipio de Uruapan, unos 500 comuneros de las regiones purépechas de Pátzcuaro, la meseta y la sierra analizaron los problemas de seguridad, educación y organización comunal y política, pero uno de los temas más importantes fue la defensa de los bosques, porque todas las regiones templadas han sido invadidas por huertas de aguacate que sólo han enriquecido a unas cuantas familias.

Admitió que hay comunidades que vendieron bosques a particulares, como ocurrió en Zirahuén, y ahora no pueden hacer nada para impedir que sigan destruyendo sus recursos naturales.

Otro acuerdo de las comunidades originarias fue respaldar a todo pueblo que decida no instalar casillas en los comicios de 2021. También aprobaron fortalecer la policía comunitaria y restablecer el sistema de jueces tradicionales, reconocidos por el Estado mexicano, para contar con armas y enfrentar a la delincuencia.

Convinieron además administrar sus instituciones de educación, particularmente de nivel superior, ya que la Universidad Intercultural Indígena de Michoacán no está cumpliendo su función porque cada vez tiene menos presupuesto.

Algunos de los 52 pueblos representados en el congreso son los de Jucutacato, Santa Fe de la Laguna, San Andrés Tziróndaro, Cuanajo, Huecorio, San Jerónimo Purenchécuaro, San Juan Tumbio, Zopoco, Huáncito, Ichán, Cocucho, San Felipe de los Herreros, Sicuicho, Charapan, Sevina, Comachuén, Aranza, Cherán Atzicurín, Paracho y Zirahuén.