Las organizaciones ecologistas Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) y Greenpeace México llamaron a la gente a tomar conciencia de cómo los excesos durante las fiestas de fin de año afectan al planeta, en lo referente al desperdicio de alimentos, al uso de pirotecnia y al consumismo en general.

El WWF invitó a la población para que en estas celebraciones regalemos algo al planeta: Debemos obsequiarle la posibilidad de recuperarse. Evitemos el desperdicio de alimentos, ya que nuestro consumo es superior a lo que el planeta puede sostener. Ahorra un tercio.

Sostuvo que a escala global un tercio de los alimentos se desperdician y con esto se despilfarran recursos naturales que se utilizan para producirlos.

Greenpeace México señaló que las festividades decembrinas detonan un consumismo desenfrenado, además de congestión vehicular y generación de basura, pero también la preparación de cantidades exageradas de comida y un mayor gasto de electricidad por las luces y adornos navideños.

En el país el consumo eléctrico aumenta hasta 30 por ciento en esta época; luces y series representan la mayor parte del incremento, pero también incide el mayor uso de electrodomésticos y la calefección.

Asimismo, llamó la atención sobre el uso de pirotecnia y su relación con el incremento de la contaminación del aire, pues estos espectáculos de luces y sonidos esparcen diversas sustancias: nitratos, sulfatos y percloratos en fórmulas de sodio, cobre, estroncio, litio, antimonio, magnesio y aluminio; neutralizantes, oxidantes, aglomerantes y perclorato de sodio que da propulsión a un cohete, además de metales pesados que aportan el color y los aerosoles que producen la detonación.

Esa mezcla genera monóxido de carbono y partículas PM2.5 al medio ambiente, que al ser inhaladas afectan la función respiratoria. Agregó Greenpeace que el perclorato de sodio contamina los cuerpos de agua y daña a microorganismos y fauna acuática.

Aunado a esto, el tráfico vehicular se incrementa en estas fechas, lo que añade contaminantes al aire de las ciudades, aparte de que el consumismo genera toneladas de basura: utensilios desechables y plásticos, adornos, envolturas y alimentos que son desperdiciados.