Laberinto Yo’eme, de Sergi Pedro Ros, se exhibirá en comunidades sonorenses mediante programa del Imcine // Para la tribu, es una realidad muy honesta
Viernes 13 de diciembre de 2019, p. 5
Antes de hablar, los dos integrantes de la tribu yaqui piden permiso a la audiencia para conversar en su lengua. Están nerviosos y se quieren poner de acuerdo. Unos minutos antes, una parte importante de su vida se proyectaba en pantalla grande.
Los dos hombres fueron elegidos como comisionados para asistir a la función de prensa de un documental que les da voz.
Laberinto Yo’eme, opera prima de Sergi Pedro Ros, retrata dos problemáticas que afectan a la tribu yaqui: el agua y las drogas.
En su película, el director lleva al espectador a estas comunidades indígenas en la sierra de Sonora. Los yaquis son un pueblo que ha logrado conservar su lengua y tradiciones pese a los constantes intentos de desaparecerlos; así lo creen sus miembros.
La tribu yaqui, que soportó la llegada del hombre blanco, ahora tiene que resistir al narcotráfico, que lleva drogas y violencia a sus pueblos de manera impune. A ello se suma su lucha por el agua, pues debido a la instalación de una presa en su región, cada vez cuesta más trabajo a sus habitantes acceder al líquido. Por ello, desde 2010, se encuentran en esta defensa.
Estrenada en el Festival Internacional de Cine Documental Docsmx, donde la cinta de Pedro Ros fue galardonada como mejor opera prima, Laberinto Yo’eme es un documento que, de acuerdo con los comisionados de la tribu yaqui, constituye una realidad muy honesta
.
Para los representantes, esta honestidad también pone al descubierto sus debilidades. A lo largo de la cinta se puede observar cómo algunos yaquis se han vuelto adictos a los estupefacientes, se acepta el machismo de la comunidad, entre otras cosas. Sin embargo, también se ve en este retrato la oportunidad de encontrar una solución a sus problemas y de autocrítica.
Faltó la visión femenina: Rubén Albarrán
El vocalista de la banda Café Tacvba, Rubén Albarrán, acudió a la función. El músico se dijo agradecido de poder escuchar los cantos sagrados que se observan en el documental, y deseó que lo sagrado de esos cantos abran los corazones, porque los considero no menos que cósmicos
.
Albarrán también llamó a evitar la privatización del agua, esperando que la película de Pedro Ros sea una flecha más que nos ayude a defender el agua, no solamente del país sino del planeta
. Asimismo aprovechó para criticar la falta de la visión femenina.
Creo que es una visión muy masculina en la película; siento que debería haber un equilibrio con una visión femenina de las yaquis; sería muy importante
, agregó el vocalista.
Los dos yaquis, por su parte, agradecieron poder escuchar su lengua materna de esa forma. Me llama la atención que cuando alguien más está expresando algo se escuchan los murmullos, los comentarios; eso es muy importante, porque para nosotros eso es el pensamiento de nuestra gente. Están hablando de la película, y lo que se escucha refuerza lo que se ve, aunque ustedes no lo entiendan
, explicó uno de ellos.
Los días 13, 14 y 15 de diciembre, Laberinto Yo’eme se proyectará en las comunidades Loma de Guamúchil, Vicam y Potam, en ese orden, dentro del programa de exhibición del Instituto Mexicano de Cinematografía “De aquí es… la película. Aquí se filmó, aquí la vemos”. El director indicó que espera que la cinta pueda verse el próximo año en algunos festivales de cine.