Nueva York. En las subastas de arte raramente aparecen grandes obras de la artista mexicana Frida Kahlo (1907-1954). Pero dos de sus creaciones con una poderosa historia detrás son esta semana las estrellas de las ventas de arte latinoamericano de Christie’s en Nueva York.

Son los cuadros Cesta con flores (1941) y La dama de blanco (1929), con precio estimado de 3 a 5 millones de dólares cada uno, que serán rematados hoy y mañana.

‘‘Es muy, muy raro tener una’’ pintura de Kahlo en una puja, ‘‘y tener dos es todavía más raro’’, refirió Virgilio Garza, director del departamento de arte latinoamericano de Christie’s en Nueva York.

Pintada con óleo sobre un plato de bronce, Cesta con flores muestra una canasta repleta de rosas, margaritas, girasoles, dalias y orquídeas que atraen a una abeja, una mariposa azul y un colibrí.

Creada en su momento de mayor madurez artística, marca también una etapa de felicidad de Frida Kahlo, cuando se reconcilia con Diego Rivera, de quien se había divorciado por sus infidelidades y vuelven a casarse.

Es una de dos naturalezas muertas que Kahlo terminó por encargo del Palacio Nacional de México, circulares porque debían instalarse en la estructura arquitectónica del comedor. Pero el proyecto finalmente no se materializó.

Frustrada con la presidencia, que nunca le pagó las obras encargadas ni las naturalezas muertas ni varios retratos, Frida vendió finalmente el cuadro Cesta con flores a una amiga, la actriz Paulette Goddard, quien lo tuvo hasta su muerte. La dama de blanco se mantiene hasta hoy en su museo de la Ciudad de México, la Casa Azul.