En México, alrededor de 18 millones de personas que habitan en las comunidades costeras son los más vulnerables por los fenómenos meteorológicos agravados por el cambio climático, señalaron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En el mundo, cada año cerca de 120 millones de personas están más expuestas a los efectos de huracanes y ciclones, que entre 1980 y 2000 ocasionaron la muerte de unas 250 mil, más las que fallecieron por esa causa en años recientes, sobre todo en África y Asia, donde los embates de estos fenómenos naturales son extremos.

En la conferencia Ciudades y comunidades costeras ante el cambio climático, Alfonso Vázquez Botello, del Instituto de Ciencias el Mar y Limnología y Alejandra Ramírez León y Maritza Isla Vargas, doctorantes del posgrado en ciencias de la sostenibilidad, dijeron que no sólo la población es frágil ante esta situación, que también afecta playas, ciénegas, manglares, ríos, estuarios, áreas de cultivo, actividades económicas y construcciones.

Vázquez Botello indicó que el cambio climático ha desencadenado el incremento acelerado del nivel del mar y de la temperatura de sus aguas, así como la intensidad de precipitaciones pluviales y variaciones en patrones del clima, ocasionando la destrucción de ecosistemas, la mortalidad de especies marinas y la proliferación de algas tóxicas.

Alejandra Ramírez León, en tanto, señaló que unos 600 millones de personas en el mundo habitan en regiones costeras que se ubican a menos de 10 metros del mar.

Por su parte, Maritza Islas consideró que el Caribe mexicano y algunas islas son los que más resentirán los impactos del cambio climático, aunque también podrían ser un espacio de aprendizaje frente a los escenarios que se vislumbran en el mundo.

Durante el pasado cuarto de siglo, los manglares han disminuido en 24 por ciento en el Caribe, debido principalmente al desarrollo costero, y más de 75 por ciento de los arrecifes de esta zona se consideran amenazados por huracanes intensos, señaló.