Alrededor de 3.5 millones de toneladas de plásticos (envases, embalajes y bolsas) que se genera en el país al año son de un sólo uso. Las cadenas de supermercados generan gran parte de éstos y no aplican medidas satisfactorias para reducirlos. Super Kompas y The Green Corner realizan algunas acciones, pero sus resultados son insuficientes, dice Greenpeace en el Ranking de supermercados según su huella plástica 2019.

Diez cadenas de establecimientos de México respondieron a un cuestionario para evaluar su disposición a reducir la contaminación plástica. Entre los temas que se evaluaron están si tienen un plan para eliminar los plásticos, si no los utilizan en frutas y verduras, si trabajan con proveedores para su eliminación, si se fomenta el uso de envases reutilizables. En la escala de evaluación que se utilizó ninguna tuvo un resultado de 10. El más alto fue de 5.6 y correspondió a Super Kompras.

Según el reporte sólo 10 cadenas atendieron las preguntas; 17 se negaron, algunas con el argumento de que la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales les había instruido no participar en el ejercicio.

Las cadenas que demostraron al menos un compromiso con la transparencia en sus operaciones fueron Walmart, Soriana, The Green Corner, Abarrotes Dunosusa, Merco, Súper Doña, Súper Willy’s, La Misión, Súper Kompras y Arámburo Supermercados. Las dos primeras tiene presencia a nivel nacional, mientras el resto se restringen a algunas zonas del país, por ejemplo la Ciudad de México, donde se ubica The Green Corner, o Súper Willy’s, con sucursales en el sureste del país, agrega el documento.

Se negaron a responder el cuestionario del ranking Chedraui, HEB, Al Super, Arteli, Piticó, Smart and Final, Cecom, Merza, S-Mart y Su Plaza. Algunas con presencia primeramente en el sur del país, como Chedraui, y otras en el norte, como Smart and Final en Baja California.

Refiere que algunos supermercados reportaron que sus acciones para reducir el uso de plásticos se establecieron a partir de leyes estatales para regular el manejo de este material de un solo uso, lo que demuestra que los esfuerzos de los congresos estatales en la gestión de residuos inciden efectivamente en las decisiones que los actores toman contra este problema.

Agrega que las acciones de los supermercados aún son incipientes y se enfocan en falsas soluciones, como usar cartón o papel en lugar de plástico, lo que traslada la presión ambiental de la contaminación por plásticos a la deforestación pues implica el uso insostenible de recursos naturales.

En el país se estima que se producen 7 millones de toneladas de plástico al año, 48 por ciento es de un solo uso; es decir, se utiliza unos minutos o dos veces. Aunque una parte de este material es reciclable, no necesariamente ocurre esto, pues apenas 6.07 por ciento llega a ese proceso, agrega Greenpeace.