Hablar de una impresora parece tema de todos los días; sin embargo, de una que cuesta más de 7 millones de dólares no es algo de la vida cotidiana.

En México, desde hace poco más de un mes, se tiene una impresora industrial única en América Latina, la cual tuvo una inversión de 7 millones 700 mil dólares.

La firma Smurfit Kappa, encargada de realizar el empaquetado de productos de todo tipo con cartón corrugado, desde alimentos hasta bienes duraderos, se ubica en Atlacomulco, estado de México. Es la empresa encargada de manejar dicha máquina, que tiene capacidad para imprimir en tercera dimensión.

Se trata de la impresora Barberan Jetmaster 1890, la primera que el grupo trae al continente.

En entrevista, Agustín Rosas, gerente de la planta de Atlacomulco de Smurfit Kappa México, afirma que la llegada de dicha maquinaria al país tiene como objetivo incrementar la producción industrial. Además, apunta, ese tipo de inversiones muestran que el país es clave para seguir inyectando recursos.

Es una tecnología reciente y de impresión digital. Lleva tiempo en el mercado, pero esta máquina es la primera que llega a América. Cambiamos gran parte de la impresión análoga a digital, explica.

Una vez en funcionamiento revolucionará los procesos actuales, ya que tendrá capacidad para imprimir digitalmente en seis colores, con impresión gráfica de alta calidad, en una sola pasada, a una velocidad de 3 mil 600 hojas por hora.

En un principio, precisa, se tiene contemplado que dicha máquina solamente pueda ser utilizada por clientes mexicanos, pero a futuro no se descarta que diversas empresas del continente puedan venir con este producto y con ello fomentar un mayor mercado mexicano, más crecimiento y llegar a una cifra superior de industrias.

Atendemos a diferentes clientes, pero entre los principales están los especializados en consumo, señala.

Otra ventaja de tener este tipo de impresiones en el país, comenta el directivo, es que, debido a que es una maquinaria digital, reduce tanto los costos de producción en empaquetado como los tiempos de entrega a los clientes.

Confianza

La inversión realizada, afirma, responde a las necesidades del mercado, particularmente el de bienes de consumo. Tendrá la capacidad de sostener y responder al demandante crecimiento del comercio electrónico. Además, forma parte de los proyectos de inversión de la compañía dentro del país.

En la empresa estamos convencidos de que México es un gran país. Quizá las condiciones actuales no son buenas, pero apostamos por el futuro. Estas inversiones las seguiremos llevando a cabo, incluso en 2020, asegura.

Anualmente Smurfit Kappa invierte entre 50 y 70 millones de dólares en el país, principalmente en temas de tecnología e innovación.

Tenemos un buen panorama de lo que está sucediendo, por ejemplo en temas de electrodomésticos y consumo. Creemos que el país está bien, entendemos que vienen retos importantes en 2020 por las condiciones globales, pero estamos confiados en México. Por eso seguiremos invirtiendo y vemos oportunidades grandes, subraya.

Para la empresa, 2019 representará un crecimiento cercano a 3 por ciento y se estima que el siguiente año será igual.

Quisiéramos que el crecimiento fuera mayor, pero confiamos en que habrá mejores condiciones. Llevamos invertidos cerca de 50 millones de dólares. El siguiente año, pensamos, será igual, enfatiza Agustín Rosas.