Un grupo de chilenos radicados en México y diversos colectivos marcharon ayer del Ángel de la Independencia a la embajada del país sudamericano en protesta por la crisis sociopolítica en la nación gobernada por Sebastián Piñera.

Entre consignas, decenas de manifestantes demandaron la renuncia de Piñera y celebraron la rebelión del pueblo de Chile. En las mantas podía leerse el apoyo internacional a la lucha contra el neoliberalismo y la derecha en América Latina.

Llegaron al número 10 de la calle Andrés Bello, donde las peticiones quedaron plasmadas en las paredes. Frases como Chile despertó, No olvidaremos y Muerte al ejército fueron pintadas en el lugar.

Por tercera semana, Chile es escenario de protestas masivas que comenzaron con el rechazo al incremento al pasaje del Metro y se transformaron en descontento ante el modelo económico y social aplicado en esa nación.

Luego de que el gobierno de Piñera decidió subir la tarifa de ese transporte, el 6 de octubre estudiantes se organizaron para llevar a cabo una evasión masiva en el Metro de Santiago, las que continuaron hasta el 18 de ese mes, cuando se dieron enfrentamientos entre los inconformes y carabineros.

Esa noche ocurrieron protestas y disturbios; en respuesta, el 19 de octubre el presidente Piñera decretó el estado de emergencia en las comunas del Gran Santiago y el toque de queda a partir de esa noche. También ordena el despliegue de militares en las calles de la capital.