Les otorgan perdón por extorsión y fraude
Empresarios se comprometen a respetar límite de densidad poblacional de 100 personas por hectárea
Jueves 31 de octubre de 2019, p. 32
Guadalajara, Jal., Salvador Cosío Gaona y Alejandro Cárdenas Ochoa, quienes encabezan las asociaciones Conciencia Cívica y Parlamento de Colonias, respectivamente, firmaron su desistimiento de las demandas, amparos y juicios que desde 2011 interpusieron para evitar que se expidieran licencias de habitabilidad o venta de las Villas Panamericanas, por haberse construido en la zona de El Bajío del municipio de Zapopan, considerada de alta fragilidad ambiental.
El convenio de desistimiento signado por Cosío y Cárdenas, al cual tuvo acceso La Jornada, estipula que la densidad poblacional máxima en las Villas Panamericanas deberá ser de 100 habitantes por hectárea, es decir, 2 mil 670 personas cuando más, tomando en cuenta que el complejo habitacional tiene un área de 26.6 hectáreas, según el documento, aunque el sitio donde están ubicados los edificios de departamentos apenas abarca 6.5 hectáreas.
El documento fue firmado el pasado 16 de octubre con la contraparte, Creaciones del Bajío SA de CV (antes Corey Integra SA de CV), por conducto de su administrador general, Alejandro Cornejo Vega, quien a su vez se comprometió a respetar la densidad habitacional acordada.
Cosío y Cárdenas alcanzaron el acuerdo después de que el fiscal general de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, dijo a principios de septiembre pasado tener abiertas al menos 17 carpetas de investigación sobre una presunta red de extorsionadores
en la que ambos personajes estarían involucrados, así como tres denuncias promovidas por Francisco Cornejo Reynoso, de la familia dueña de Creaciones del Bajío, empresa que antes, como Corey Integra, financió parte de las Villas Panamericanas.
En el desistimiento, los Cornejo otorgan el perdón que en derecho corresponde en las denuncias por fraude procesal y extorsión 4171/2019, 92164/2019, 92158/2019 y 99963/2019.
A su vez, Cosío y Cárdenas se comprometieron a no volver a demandar, reclamar ni llevar a cabo acciones judiciales que comprometan o interrumpan el sano desarrollo, ejecución y comercialización de las Villas Panamericanas y/o Villa Bosque
, dejando sin efecto los cuatro juicios administrativos contra la venta de las villas que estaban abiertos, además de ocho recursos de reclamación, tres amparos otorgados por juzgados de distrito, dos más por tribunales colegiados de circuito y dos recursos de queja también promovidos ante tribunales colegiados.
Las villas, edificadas en 2011 para los Juegos Panamericanos celebrados ese año en Guadalajara, permanecen deshabitadas debido a los recursos legales que impedían comercializarlas.