Al cierre del tercer trimestre de este año, el subejercicio en el gasto público fue de 151 mil 337 millones de pesos, resultado de un menor egreso presupuestado de 81 mil millones de pesos y de un gasto no programable –que incluye intereses por pago de deuda, participaciones a estados y municipios, adeudos fiscales anteriores y apoyo a ahorradores de la banca– que fue inferior en 70 mil 345 millones de pesos a lo previsto, informó anoche la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

El monto del subejercicio fue menor a los 232 mil millones registrados en agosto.

La inversión física registró un desplome de 14.4 por ciento al pasar de 474 mil 157 mil millones de pesos en el periodo enero-septiembre de 2018 a 422 mil 174 millones en el mismo lapso de 2019.

En los nueve meses que comprende el Informe de Finanzas Públicas y Deuda Pública de 2019, los ingresos presupuestarios del sector público resultaron inferiores al programa en 12 mil 6 millones de pesos.

Al excluir la aportación patrimonial a Pemex, los ingresos presupuestarios registran una reducción de 1.5 por ciento en términos reales con respecto a 2018.

La desviación se debe a menores ingresos petroleros en 62 mil 393 millones de pesos, debido principalmente a una menor plataforma de producción y volumen de ventas internas de Petróleos Mexicanos y menores ingresos de la Comisión Federal de Electricidad en 8 mil 758 millones de pesos.

Adicionalmente, se presentaron menores ingresos tributarios por 68 mil 87 millones respecto al programa por una menor recaudación en el impuesto al valor agregado neto, que se compensó con ingresos no tributarios superiores a lo previsto en 109 mil 566 millones por ingresos del IMSS e Issste mayores en 17 mil 666 millones.

Pese al entorno económico adverso, al cierre del tercer trimestre de 2019 los principales balances de las finanzas públicas fueron mejores que lo programado, aseguró la SHCP.

Precisó, que se registró un superávit primario del sector público, definido como la diferencia entre los ingresos totales y los gastos distintos del costo financiero, de 279 mil 868 millones de pesos, mayor al monto previsto originalmente de 153 mil 93 millones de pesos y al registrado el año anterior de 114 mil 202 millones de pesos.

Este nivel de superávit primario es compatible con el estimado en los Criterios Generales de Política Económica 2019 de uno por ciento del producto interno bruto (PIB).

Sin embargo, en el mismo lapso, el balance del sector público presentó un déficit de 160 mil 226 millones de pesos, menor al previsto en el programa de 349 mil 533 millones de pesos y al déficit de 311 mil 19 millones de pesos observado en el mismo periodo de 2018.

La deuda del sector público federal aumentó 8.6 por ciento en términos nominales, equivalentes a 876 mil 769 millones de pesos.

Así, la deuda del sector público federal, que incluye la deuda neta del gobierno federal, de las empresas productivas del Estado y de la banca de desarrollo, al cierre del tercer trimestre de 2019 se ubicó en 11 billones 35 mil 785.3 millones de pesos, que se compara desfavorablemente con el saldo del tercer trimestre del año pasado cuando alcanzaron 10 billones 158 mil 817 millones de pesos.

La deuda interna neta se situó en 7 billones 46 mil 699.3 millones de pesos y la externa ascendió a 203 mil 148.6 millones de dólares.

Como proporción del PIB, el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público se ubicó en 43 por ciento, menor en 1.9 puntos al nivel observado al cierre de 2018.