Jueves 31 de octubre de 2019, p. a12
París. El español Rafael Nadal y el serbio Novak Djokovic, debilitado por enfermedad, se clasificaron ayer a octavos de final del Masters 1000 de París-Bercy, tras superar sus primeros partidos de esta edición en el torneo.
Djokovic, número uno mundial, lo hizo con susto incluido. Tuvo que salvar dos bolas de set en la primera manga para poder deshacerse por 7-6 (7/2) y 6-4 del francés Corentin Moutet, de 20 años y 97 de la clasificación de la ATP.
El tenista de Belgrado de 32 años, subcampeón el año pasado en París-Bercy, se medirá en la siguiente etapa, los octavos de final, al británico Kyle Edmund (75), que sorprendió al argentino Diego Schwartzman (15), reciente finalista en Viena, por 7-5 y 6-3.
Djokovic compareció después de su victoria ante la prensa, con la voz dañada y admitiendo que está resfriado.
Estos días recientes me he contagiado de algo. No me sentía con mi mejor forma
, explicó, precisando que para nada
se planteó declararse baja por este problema de salud, aunque siente que esa debilidad le frenó por momentos, sobre todo en el primer set
.
Justo después de la victoria de Djokovic llegó el turno de la primera presencia de Nadal este año en París-Bercy.
El mallorquín, número dos mundial y que tiene seguro pasar el lunes a la primera posición mundial en la siguiente clasificación ATP, se impuso en dos mangas a otro francés, Adrian Mannarino (43), por 7-5 y 6-4. Nadal se rencontró en este partido con la competición oficial, más de mes y medio después de su título en el Abierto de Estados Unidos.
No es fácil volver al circuito después de una ausencia tan larga. Además, jugar en esta superficie es difícil, sobre todo ante un adversario muy peligroso. Así que estoy contento
, afirmó Nadal.
En la siguiente ronda, jugará contra un viejo conocido, el suizo Stan Wawrinka (16), quien venció 7-6 (7/3) y 7-6 (7/5) al croata Marin Cilic (24).