Yeidckol Polevnsky aseguró que no renunciará a la dirigencia de Morena ni a su aspiración de participar en la elección interna porque no incurrió en una falta moral ni legal en el tema de sus impuestos.

Incluso negó que le hayan condonado más de 16 millones de pesos, pues dijo que además del error de su contador al no cambiar su régimen fiscal cuando dejó la actividad empresarial y se convirtió en senadora, hubo dolo del Servicio de Administración Tributaria (SAT) porque le pretendía cobrar un IVA que no generó, así como los recargos y multas que de ello derivaron.

No es que me condonaran impuestos (en 2013), es un tema de corrección de algo que no me correspondía, pero si me hubieran condonado habría estado en estricto apego a derecho, porque la ley establecía esas condonaciones, sostuvo en entrevista. Y lamentó que sus contrincantes en Morena aprovechen este tema en un intento por sacarla del proceso electoral, porque no tienen méritos para ser candidatos a la presidencia del partido.

Mala leche

Consideró que los del SAT actuaron de muy mala leche, porque le ordenaron una auditoría al considerarla no localizable; si todo mundo sabía que era senadora y no había cambiado su domicilio fiscal.

Para mí es una corrección que hicieron de lo que me estaban cobrando mal, porque yo no tenía que pagar IVA. No es que me perdonaron o me condonaron impuestos. No, es una situación distinta, ­defendió.

Yeidckol Polevnsky aseguró que no tiene por qué renunciar a la dirigencia de Morena ni al proceso interno, a pesar de que sus contrincantes “quieren quitarme para poder manipular la elección, porque la única que no ha hecho campaña soy yo, apegada al estatuto. Hay que ver con el dinero de quién están haciendo campaña, tanto unos como otros.

Subrayó que “los peores enemigos están adentro… Me descalifican sin conocer la verdad, eso habla de que son de muy baja calaña”.