Sábado 5 de octubre de 2019, p. 22
Hong Kong. La jefa ejecutiva de la Región Administrativa Especial de Hong Kong, Carrie Lam, anunció ayer la aplicación de una ley de emergencia al prohibir el uso de máscaras durante las protestas, medida que no se utilizaba desde 1967, en un intento por poner fin a meses de manifestaciones antigubernamentales violentas.
Lam empleó la medida que data de 1922, debido a que la región atraviesa su peor crisis política desde que fue devuelta a Pekín en 1997, con protestas diarias y enfrentamientos cada vez más violentos entre las fuerzas de seguridad y manifestantes que se cubren el rostro.
En rueda de prensa, la mandataria indicó: Creemos que la nueva ley tendrá un efecto disuasorio en los manifestantes violentos y ayudará a la policía en su misión de mantener el orden
, también precisó que la prohibición, que entró en vigor a medianoche, no significa que su gobierno entre en estado de emergencia.
Por lo pronto, el gobierno suspendió el servicio de trenes en varias estaciones a causa de los daños que hay a lo largo de las vías.
Pekín respalda la medida
La ley permite al Ejecutivo adoptar cualquier medida
, sin autorización del Legislativo, si se produce una situación de emergencia o si existe un peligro para la población.
Desde junio, muchos manifestantes empezaron a usar máscaras en las movilizaciones para evitar ser identificados y que se abran diligencias contra ellos. Algunos también llevan casco, gafas de protección o máscaras antigás para protegerse de los lacrimógenos y proyectiles lanzados por la policía.
El pasado martes, la ciudad vivió su jornada más violenta desde junio. Hong Kong fue escenario de numerosos enfrentamientos en diversos barrios, mientras en China celebraban el 70 aniversario de la instauración del gobierno chino. Pekín mostró rápidamente su apoyo a dicha medida, que consideró extremadamente necesaria
, e indicó que el caos actual en Hong Kong no puede continuar indefinidamente
.
En redes sociales hubo numerosos llamados a protestar durante los próximos tres días.
En tanto, un grupo de manifestantes, muchos de ellos enmascarados, invadió las calles del barrio central, y decenas de personas apilaron barreras de plástico, palos y conos de tráfico para formar una barricada, además de romper pancartas con símbolos chinos. La policía respondió a las protestas con gases lacrimógenos.