Jueves 3 de octubre de 2019, p. a38
Toluca. Con un plantel juvenil y sin europeos
, la selección mexicana y su técnico, Gerardo Martino, regresaron a la senda del triunfo tras vencer 2-0 a Trinidad y Tobago, este miércoles en partido amistoso disputado en el estadio Nemesio Diez, en Toluca.
Las anotaciones del conjunto tricolor fueron obra de José Juan Macías, al minuto 23, y Ricardo Angulo, al 31.
Los jugadores del Tri juvenil que conformó el Tata sólo con elementos que militan en el futbol local salieron al campo de juego con mucho ímpetu, conscientes de que este duelo significaba su última oportunidad para ganarse un puesto en la selección mexicana que disputará la próxima Liga de Naciones de la Concacaf.
La vulnerabilidad que mostró el cuadro trinitario le permitió a los tricolores generar jugadas de peligro muy pronto, pues en los primeros minutos Érick Aguirre y Macías estuvieron muy cerca de abrir el marcador.
Pese a las múltiples amenazas de gol por parte de México, el balón no lograba entrar en el arco trinitario. Fue hasta el minuto 23 cuando Macías consiguió perforar el arco tras una excelente jugada individual en la que aprovechó un error defensivo para enfilarse al área rival y rematar con la pierna izquierda para firmar el 1-0.
Sólo ocho minutos después, al 31, Sebastián Córdova envió un pase desde la derecha a Ricardo Angulo, quien envió un disparo raso para conseguir el segundo tanto tricolor.
Tras los goles, la zaga caribeña lució aún más endeble, y su ofensiva no fue capaz de exigir al arquero tricolor Raúl Gudiño; sin embargo, los mexicanos no pudieron aprovechar dicha situación para ampliar su ventaja antes de irse al vestidor.
En el complemento, el poder ofensivo del Tri se diluyó. Con el triunfo amarrado, los mexicanos bajaron el ritmo de juego y carecieron de creatividad para hacer más daño a un rival que se mostró débil y con muy pocas ideas en el ataque.
Previo al inicio del partido, el sonido local pidió a la afición no emitir expresiones discriminatorias para evitar futuras sanciones por parte de la FIFA, lo cual, al parecer, fue bien recibido por el público, que paulatinamente dejó de lanzar el grito homofóbico.