Especialistas destacaron que en el debate sobre el nuevo etiquetado frontal de alimentos y bebidas es necesario no dejar atrás el tema de la educación. Coincidieron en que se impulse una estra-tegia basada en enseñar por-ciones de ingesta y tipos de comi-da adecuados.

En el foro Tecnología, Innovación y Etiquetado Frontal Nutricional, organizado por la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Ciencia y Tecnología de Alimentos, Aída Fayad Hassan, asesora en nutrición y obesidad, indicó que en promedio en los hogares mexicanos se compran al año 352 kilos de productos altos en azúcar, bebidas endulcoradas y botanas saladas, según datos de 2013.

Indicó que 45 por ciento de los internautas compran por la red comida como hamburguesas, tacos, pizzas, entre otros. Expuso que se estima que de 2018 a 2023 este negocio crecerá en 210 por ciento y nadie está volteando a ver esta situación. Señaló que la tarea pendiente es educar para mejorar los hábitos alimenticios de las personas.

El nuevo etiquetado de alimentos y bebidas en México será parecido al chileno, en el cual, con sellos en forma de octágono se identificará a los productos con niveles elevados de azúcar, sal, grasas y contenido calórico.

José Antonio Turueño Senosiain, socio fundador de la agencia de investigación cualitativa Phenoma, presentó los resultados de un estudio en la materia. Destacó que 75 por ciento dijo tomar decisiones con respecto a lo que consume, pero sólo 10 por cierto pudo validar que tiene la información completa para hacerlo.

Indicó que de 2015 a 2018, en las mediciones que se han realizado la tendencia es que hay un crecimiento de personas usando la información del etiquetado nutrimen-tal vigente.

Por su parte, Susana Socolovsky, presidenta del Congreso Latinoamericano de Ciencia y Tecnología de Alimentos, rechazó el nuevo modelo de etiquetado frontal que se propone para México por su falta de claridad y porque inhibiría las innovaciones tecnológicas en la producción de alimentos, debido a la generalización de productos independientemente de su composi-ción nutrimental.

Expuso que si se aplica en el país este tipo de etiquetado, 95 por ciento de los productos del supermercado quedarían señalados.

Entrevistados aparte en el Foro Nacional de Normalización 2019, Héctor Álvarez de la Cadena, pre-sidente de la Asociación de Empresas Biotecnológicas Mexicanas, aseveró que los cereales serán los productos más perjudicados con el nuevo etiquetado.

Asimismo, sostuvo, se afec-tarán derechos de propiedad intelectual porque se busca prohibir que se utilicen personajes de algunas marcas para no incen-tivar el consumo en los niños de ciertos productos, por ejemplo, al Tigre Toño en las Zucaritas.

Francisco Cervantes, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), aseveró que todavía hay tiempo para que el sector alimentario presente una contrapropuesta a los legisladores antes del primero de octubre. Lo que esté mal tenemos que corregirlo. En eso estamos bastante claros. No hay ninguna negativa a eso y tenemos toda la voluntad para arreglarlo pero con diálogo y no a garrotazos, expresó.