Los aspirantes a cargos de dirigencia en el Comité Ejecutivo Nacional y el Consejo Nacional de Morena que tengan puestos en la actual estructura directiva, de elección popular o en el gobierno deberán renunciar para participar en ese proceso, definió ayer la Comisión Nacional de Honestidad y de Justicia.

Ese órgano partidario emitió ayer los lineamientos que complementan la convocatoria al tercer Congreso nacional ordinario, el cual se realizará en noviembre; las medidas se aplican también para los candidatos a congresistas –quienes, a su vez, participarían en la votación de la dirigencia, una vez que se determine el método– y para los cargos ejecutivos del partido.

Así, se determinó que los denominados protagonistas del cambio verdadero con cargos en los consejos y comités distritales, municipal, estatal y nacional no podrán participar, excepto si renuncian previamente.

Se aplica la misma previsión para los militantes que desempeñen un puesto de elección popular, sean ministros, magistrados o jueces federales o locales, servidores públicos de la administración de los tres órdenes de gobierno federal, estatal o municipal y los llamados servidores de la nación en todos sus niveles, conforme define el estatuto de Morena.

La separación del cargo será mediante renuncia o licencia y se podrá presentar hasta el momento de su postulación en el congreso distrital correspondiente.

La prohibición no se aplica para el caso del ejercicio del voto en el proceso interno de renovación de órganos estatutarios.

Además, se recordó que está prohibido hacer uso de recursos públicos o de partido para hacer proselitismo y obtener una ventaja indebida, porque tales prácticas vulneran el principio de equidad en la contienda electoral, así como los principios éticos, políticos y democráticos que hacen de Morena un partido diferente.