Los crímenes de odio como la masacre en El Paso, Texas, ocurrida el 3 de agosto, surgen no únicamente de un loco que tuvo acceso a un arma, sino de la ignorancia, dijo Marcela Celorio, cónsul general de México en Los Ángeles.

“La falta de educación es el no entender al otro, es el no conocer y cuando hay ignorancia… nos enfrentamos a este tipo de tragedias”, enfatizó la funcionaria en entrevista telefónica con La Jornada e indicó que la instrucción es uno de los métodos fundamentales para prevenir el odio y discriminación.

Tras el tiroteo que causó 22 personas muertas y una veintena de heridos, en el consulado de Los Ángeles se realizaron dos acciones: al interior y con la comunidad externa.

Curso sobre ataques

Primero, reuní a todo mi personal y les pregunté cómo se sentía, dijo Celorio. Además, solicitó a la policía de Los Ángeles un curso sobre cómo reaccionar ante un hecho de esta naturaleza. Es importante poder protegernos a nosotros mismos y al público usuario.

Celorio relató que el incidente en El Paso, Texas, “es algo que nos deja en shock, pero al mismo tiempo hay que seguir caminando y trabajando… Nunca había sucedido un ataque terrorista dirigido a mexicanos en la historia, y así lo debemos tomar en cuenta”.

Añadió que la acción hacia el exterior fue tener un dialogo comunitario para platicar de su sentir y de otros temas como el Censo 2020. Hemos estado en contacto con líderes comunitarios, personalidades del mundo artístico, cultural, filantrópico para que nos digan cómo están percibiendo las cosas y podamos identificar vías que nos ayuden a combatir ese odio y discriminación.

Celorio ponderó a la instrucción como el camino para prevenir masacres. En este país (Estados Unidos) podemos hablar de que un loco fue y obtuvo un arma, pero no son solamente los locos, es la ignorancia, es ella falta de educación, el no entender al otro, es el no conocer.