Pese a que nueve universidades públicas que enfrentan una crisis financiera presupuestal han ahorrado casi 800 millones de pesos en el primer semestre de este año, como resultado de programas de austeridad, este monto será insuficiente para concluir este año sin problemas de pago de nómina, reconoció Carmen Enedina Rodríguez Armenta, directora general de Educación Superior Universitaria de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Aceptó que algunas de ellas se quedarán sin recursos antes de concluir el año, por lo que se realizan gestiones para completar un fondo; pero no es un problema que se pueda resolver de la noche a la mañana. Es un problema estructural que tiene muchos años.

Entrevistada el término de la ceremonia del 60 Año Académico de la Academia Mexicana de Ciencias, la funcionaria de la SEP afirmó que la dependencia acompaña a las universidades, pero tienen que hacer su tarea, en referencia a que éstas han cumplido con su plan de restructuración financiera y presupuestal firmado en diciembre pasado, y que les permitió obtener recursos federales adicionales por alrededor de 2 mil 500 millones de pesos, con lo que las casas de estudios pudieron pagar la nómina y prestaciones de sus trabajadores, incluido el aguinaldo.

Sin dinero para la nómina a partir de septiembre

Ya hace unas semanas, el presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios, Enrique Levet Gorozpe, advirtió que varias universidades no tendrán recursos suficientes para cubrir la nómina de sus trabajadores desde los meses de septiembre u octubre, y amagaron con realizar un paro nacional ante esta problemática.

Las casas de estudios públicas estatales que enfrentan esta crisis son las universidades autónomas del Estado de Morelos, Benito Juárez de Oaxaca, de Nayarit, de Sinaloa, de Zacatecas, del Estado de México, Juárez de Tabasco, de Chiapas y la Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, que requerirían al menos 5 mil millones de pesos.

Rodríguez Armenta dijo que nueve de las universidades públicas que enfrentan esta situación están haciendo su tarea para resolver este problema estructural, prueba de lo cual son los ahorros por casi 800 millones de pesos.

Sobre las gestiones para conformar un nuevo fondo de ayuda a estas universidades, informó que todavía se desconoce y que actualmente hay un diálogo cercano tanto con la representación de los trabajadores universitarios como con las autoridades de esas casas de estudio, pero siempre cuidando el pleno respeto a su autonomía.