En el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) estamos empeñados en rescatar a la ciencia mexicana de la inercia mercantil y el olvido en que se le tenía, aseguró su directora general, María Elena Álvarez-Buylla, quien insistió en que esa institución ha sido sometida a una guerra mediática sin precedente.

El mensaje de la funcionaria, presentado en la inauguración del 60 Año Académico de la Academia Mexicana de Ciencia (AMC) ante más de un centenar de destacados investigadores y científicos, indica que la restructuración del aparato burocrático que está llevando a cabo el Conacyt tiene el objetivo de destinar un mayor presupuesto a los rubros sustantivos y que el gasto público se refleje en un mayor bienestar de la sociedad.

Leído por Luz María del Carmen Calvo, encargada del despacho de la Dirección de Investigación Científica Básica y quien acudió en su representación al evento, el mensaje de Álvarez-Buylla convocó a la comunidad académica y científica al encuentro y el diálogo constructivo.

Quiero invitarlos en este importante espacio académico, plural, que es la Academia Mexicana de Ciencias, a que construyamos juntos un modelo de pentahélice que convoca a la participación de los sectores científico, privado y social a unir esfuerzos y crear sinergias colaborativas para encontrar soluciones pertinentes, viables y adecuadas a los contextos locales, para generar soluciones a las problemáticas sociales y ambientales que nos permitan vivir con mayor bienestar, dijo, después de afirmar que también es necesaria esta colaboración para el diseño y propuestas de la nueva Ley General de Humanidades, Ciencia y Tecnología, todavía pendiente.

En el inicio del acto, el presidente de la AMC, José Luis Morán, tras presentar un breve recuento de las actividades realizadas por dicha asociación durante 2018, señaló que en el primer semestre de 2019 ha operado con 25 por ciento del presupuesto del año pasado, cuando recibió 50 millones de pesos.

En entrevista posterior, Morán López detalló que en el primer bimestre del año, la Academia no recibió recursos públicos y que en marzo le fueron entregados 20.8 millones para los siguientes seis meses, es decir, hasta agosto, por lo que actualmente realiza gestiones encaminadas a la obtención de recursos para los últimos cuatro meses del año.

Sin embargo, destacó que la AMC está dispuesta a apoyar cualquiera de las iniciativas del Conacyt para convencer a los tomadores de decisiones de incrementar el gasto público en educación e investigación científica.

En su oportunidad, Adolfo Martínez Palomo, ex presidente de la AMC, expresó que el impulso renovador de la ciencia en el país debe partir, sobre todo, del diálogo que permita diseñar juntos las estrategias de su desarrollo. Pero, advirtió, para que ese diálogo sea fructífero hay dos condiciones: una, respeto absoluto a la independencia académica de todas las instituciones y la libertad de definir temas y formas de evaluación y promoción. Y la otra, respetar a los profesionales de la ciencia. ¡No más menosprecio público a los investigadores!, exigió, seguido de un largo aplauso de los asistentes.

El día de hoy debemos considerar, con toda seriedad, si lo que estamos festejando es el cumpleaños 60 de una academia madura y pujante o si, por el contrario, pronto lamentaremos su desaparición prematura, alertó el también miembro de El Colegio Nacional e investigador emérito del Sistema Nacional de Investigadores.