Las iglesias anglicana, luterana, bautista e integrantes de la católica de El Salvador y México, así como de la iglesia presbiteriana en Estados Unidos rechazaron las políticas racistas, xenófobas y las medidas adoptadas por la actual administración de Estados Unidos que agravan aún más las precarias condiciones de vida de los migrantes.

Tras sostener un encuentro con el Foro Ecuménico del Consejo Latinoamericano de Iglesias de El Salvador, exhortaron a que los gobiernos de la región centroamericana y México elaboren junto a los grupos religiosos y sociedad civil una estrategia común dirigida a los migrantes, y promuevan en sus políticas públicas programas y proyectos para articular procesos que respondan a las necesidades de esta población.

Instaron al Sistema de la Integración Centroamericana (Sica), al gobierno de México, a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), a integrar su visión regional en la aplicación de los trabajos que están impulsando, como el plan nacional de desarrollo integral y que esas actividades confluyan en un mismo proyecto.

Para lograrlo propusieron que esta iniciativa sea coordinada en mesas regionales e interregionales de Canadá, Estados Unidos, México y Centroamérica, de tal forma que se constituya una Red de Mesas de Movilidad Humana, liderada por organizaciones de migrantes.

Demandaron la creación de corredores humanitarios, desmilitarizados, de libre tránsito para la movilidad humana segura y coherente con el derecho internacional, el cual estaría a cargo de las iglesias en coordinación con los gobiernos, y con organizaciones internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Sica. El sacerdote anglicano Arturo Carrasco sostuvo que una de las iniciativas a impulsar es también el fortalecimiento de los albergues para migrantes. Desafortunadamente han sido rebasados en su capacidad, hay lugares en donde están al tope y ya no pueden recibir más, entonces necesitamos articular y abrir más espacios.

Indicó que se presionará para que se respeten los derechos humanos a las autoridades de Centroamérica, México y Estados Unidos. Recordó que hay evidencia de que la Guardia Nacional ha intentado entrar a algunos albergues en la frontera norte y sur.