Luciendo su medalla mundial de plata como muestra de constancia a sus 33 años de edad, Rommel Pacheco espera que el selectivo olímpico a Tokio 2020 sea justo y limpio, por lo que pide a la Federación Mexicana de Natación un proceso abierto y público para que no se preste a malos entendidos, porque el control pasado (a puerta cerrada) fue ambiguo y se vio afectado.

Ganador de una de las tres plazas para México a Japón en el trampolín individual tres metros con su octavo lugar, el yucateco reconoció que no competir en los Juegos Panamericanos de Lima es un golpe fuerte y aún así logró tener la fortaleza mental para sobreponerse y encarar el Mundial de Gwangju.

Ese fue el secreto de la medalla de un metro, platicó Rommel en conferencia de prensa, para refrendar su compromiso y seguir preparándose para el próximo año con el selectivo a la Copa del Mundo y Tokio, con el anhelo de ganar la única presea que no tiene en su colección.

En 26 años de trayectoria, medallista del orbe en sincronizados y mixtos, y finalista olímpico, confiesa que nunca había pasado por un momento tan angustiante como el de quedar excluido hace más de un mes en el selectivo de León.

Por eso exige desde ahora que para no crear más polémicas, la FMN defina con claridad “las bases de cómo serán los procesos selectivos, si tomarán en cuenta competencias internacionales, trayectoria, control nacional.

“El pasado fue muy ambiguo, sin definir si era por trayectoria, disciplina y resultados, en eso cumplía los parámetros, lo que sí deberían definir, que digan ‘el primero va, una puntuación específica, un lugar nacional’, para que no se preste a malos entendidos”, explicó el clavadista.

Argumentó que si lo que se quiere es integrar a la mejor selección –como la que se hizo para el Mundial y los Panamericanos–, se debe buscar a los mejores, porque lo que queremos como país es que se vean los resultados para la federación, Conade y para México.

Serio, sonrojado, risueño y por momentos melancólico, dijo no tener problemas con nadie; espero que el apoyo siga, ahí están los resultados, eso es lo que habla por mí, porque prefiero hablar con medallas que defenderme con palabras.

Insistió que seguirá con Jahir Ocampo en los sincronizados tres metros, la prueba que, según él, de haber competido en Gwangju, seríamos plata.

Como en otras ocasiones, Pacheco reiteró que el trabajo de los entrenadores chinos comandados por Ma Jin ha rendido frutos por más de una década y pidió a las autoridades a seguir invirtiendo en el deporte.