Miércoles 5 de junio de 2019, p. 33
La epilepsia es una de las 20 principales causas de consulta médica en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); afecta a dos por ciento de la población, en su mayoría niños, informó José Juan García Damián, neurólogo en el Hospital General de Zona 2-A.
Explicó que los síntomas son variados y en ocasiones pasan desapercibidos, como el caso de pacientes que durante varios minutos no responden a estímulos ni contestan, aunque estén despiertos.
Las manifestaciones de la enfermedad dependen del área del cerebro que esté dañada. Las más comunes son los desmayos o pérdida del conocimiento sin causa aparente, los movimientos involuntarios de todo el cuerpo o de una parte del mismo durante uno a cinco minutos.
El especialista comentó que en el IMSS se otorgan más de 900 mil consultas al año por epilepsia en las unidades de Medicina Familiar.
Datos de la Organización Mundial de la Salud señalan que entre 40 y 50 millones de personas en el contexto mundial viven con epilepsia, que se caracteriza por episodios de convulsiones por descargas eléctricas en células del cerebro.
Respecto de las poblaciones afectadas, el especialista comentó que 70 por ciento son niños, en quienes la causa principal es la falta de oxígeno al momento del nacimiento. Los adolescentes y jóvenes representan 20 por ciento de los casos y el mal surge como consecuencia de infecciones o golpes directos en la cabeza. Otro 10 por ciento son adultos mayores, en quienes la causa de la epilepsia son tumores o hemorragias en el cerebro.
García Damián destacó que uno de los principales desafíos en el control del padecimiento es la falta de apego de los pacientes a los tratamientos, los cuales son complejos y en ocasiones implican el consumo de entre 20 y 30 pastillas al día, de acuerdo con la gravedad del mal.
Los problemas más graves los enfrentan quienes sufren convulsiones, porque se caen y tienen mayor riesgo de lesiones graves, incluso fracturas. También presentan las mayores tasas de trastornos mentales como ansiedad y depresión.