Las delegaciones de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), que –según información del portal de transparencia– durante el primer trimestre del año han entregado 783 mil 572 pasaportes y reportan ingresos de mil 126 millones 68 mil 115 pesos por la emisión de estos documentos, se encuentran en la incertidumbre de verse restringidas y algunas hasta desaparecer en caso de cumplirse a rajatabla las medidas de austeridad solicitadas por el Presidente de la República para liberar mayores recursos.

De acuerdo con un memorándum emitido por el presidente Andrés Manuel López Obrador, el 31 de mayo se cumple el plazo para que las dependencias federales desocupen las plazas no autorizadas y se ajusten las estructuras orgánicas conforme a los procedimientos y tiempos establecidos.

En el texto se precisa, además, que no habrá personal de confianza ni altos mandos en las delegaciones federales de las dependencias y entidades. El delegado estatal de Programas para el Desarrollo en cada entidad federativa deberá desempeñar la función en representación de todas las instituciones del gobierno federal, para lo cual se apoyará en el personal operativo de base.

Fuentes que fueron consultadas por La Jornada confirmaron que la oficina a cargo del canciller Marcelo Ebrard analiza estas medidas y se encuentra preparando su argumentación para que no sean eliminadas las delegaciones.

Según el manual de organización de la Dirección General de Delegaciones de la SRE, a la fecha hay 45 oficinas de este tipo en la República, 11 de las cuales se encuentran ubicadas en la Ciudad de México; asimismo, se auxilian de 114 oficinas de enlace dependientes de las autoridades estatales o municipales distribuidas en territorio nacional.

Los números reportados en el sistema de transparencia incluyen datos de la Dirección General de Delegaciones, que de enero a marzo reporta la producción de 15 pasaportes e ingresos por 28 mil 555 pesos.

Desaparecen direcciones generales adjuntas

Por medio del memorándum también se ordena que se eliminen las plazas con nivel de Dirección General Adjunta, las cuales –se alega– fueron creadas injustificadamente a partir del sexenio del ex presidente Felipe Calderón.

En la Cancillería esta orden no será excepción y a quienes ocupan esos cargos les adelantaron que desaparecerá su plaza. Aún sin definir cómo quedará la estructura final, algunos de los implicados serían desplazados a otros cargos con menores sueldos o terminarían la relación laboral. Según fuentes, se prevén despidos de personal de confianza de distintas áreas de la Cancillería mexicana.

Consultada por separado, la secretaria general del sindicato de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Hortencia Navarro Ortiz, indicó que desde que el memorándum se hizo público tuvo comunicación con la autoridad en la Cancillería y les afirmaron que no me van a tocar a mi gente de base.

Afirmó que hay muy buen diálogo en la Secretaría: “Como sindicato somos muy institucionales, es decir, lo principal es que los agremiados trabajen en un buen ambiente laboral, que no se vean violentados en sus derechos y siempre salvaguardarlos… Afortunadamente todo ha caminado muy bien”.

Puntualizó que hasta el momento no hay indicaciones en torno al cierre de alguna de las 45 delegaciones de la SRE y tiene conocimiento de que están en reuniones para estudiar el tema.