Londres. El líder de la oposición laborista británica Jeremy Corbyn, anunció ayer la ruptura de las negociaciones con el gobierno de la primera ministra conservadora Theresa May, entabladas a principios de abril para buscar una salida al bloqueo del Brexit.

Las discusiones han ido tan lejos como era posible, afirmó Corbyn, quien anunció que abandonó la discusión ante la creciente debilidad e inestabilidad de Downing Street, el opositor explicó además que en las últimas semanas se socavó la confianza en la capacidad del ejecutivo para alcanzar un compromiso” a medida que el partido conservador avanza en el proceso hacia la selección de un nuevo gobernante.

En tanto, la premier May atribuyó el fracaso de las conversaciones a una falta de posición común de los laboristas, quienes “no saben si quieren llevar a cabo el Brexit u organizar un segundo referendo para impedirlo”. Entabladas a principios de abril, estas conversaciones tenían como finalidad encontrar un acuerdo susceptible de obtener el apoyo de una mayoría del Parlamento, que desde enero rechazó tres veces el texto firmado en noviembre por la gobernante británica con sus 27 socios europeos.

May prometió a los euroescépticos en el seno del Partido Conservador que dejaría el poder en cuanto lograra la aprobación del acuerdo cerrado con Bruselas, los anti bloque consideran que la primera ministra hizo concesiones inaceptables a la Unión Europea (UE) y no quieren que siga en el poder cuando empiece la segunda, y mucho más importante fase de negociación: el acuerdo sobre la futura relación tras el Brexit.

Ante la evidencia de que el acuerdo de May podría volver a fracasar en una cuarta votación, prevista para principios de junio, y temiendo que la primera ministra se aferre al poder, el jueves por la tarde los diputados conservadores la llamaron a fijar una fecha para su salida.

Tras esa cuarta votación, Graham Brady, responsable de la organización del grupo parlamentario conservador explicó: May y yo volveremos a reunirnos para acordar un calendario para la elección de un nuevo líder del partido. Y eso ocurrirá independientemente del resultado de la nueva votación.

Calculando bien sus tiempos, el controvertido ex ministro de Relaciones Exteriores británico Boris Johnson, ferviente defensor del Brexit y uno de los principales rivales de May dentro de su propia formación, anunció públicamente el jueves que sería candidato al puesto de primer ministro.

Con el fracaso de la negociación entre gobierno y oposición persiste el caos en torno al Brexit, agravando la preocupación de los empresarios británicos, tras el referendo de junio de 2016, en el que 52 por ciento de británicos votaron a favor del Brexit.

Reino Unido debió abandonar la UE el pasado 29 de marzo, pero el repetido rechazo del Parlamento al acuerdo de separación con Bruselas empujó a May a aceptar un aplazamiento flexible, hasta el 31 de octubre, aunque el país puede abandonar antes el bloque si encuentra una solución al bloqueo.

De acuerdo al politólogo Simon Usherwood, de la Universidad de Surrey, el fin de May no implicará necesariamente el fin del problema sobre su acuerdo de Brexit, sigue siendo el único plan aceptado por la UE y no hay muestras de que esta quiera renegociarlo con un nuevo primer ministro.