Insurgents es el título de la reciente producción de la banda española Decibelios. Contiene el espíritu musical y letrístico primigenio de la agrupación, pero instalada en un contexto actual que incorpora sonidos y citas del mundo actual. Si alguien quiere saber quién es Decibelios, por sus letras lo sabrá comentó Fray, cantante y uno de los fundadores de la banda.

El arte y el rocanrol son parte del arte, de lo bello de la vida. Y el arte a mí me ha salvado. Así vivimos nuestro tiempo, la crisis. Nuestro espacio es la calle y nuestro dios es la lucha, dice.

Agrega: Esto lo haces con una ilusión, si no de cambiar el mundo, casi es el que buscas. En nuestros conciertos nos la pasamos bien: bebemos, saltamos, bailamos. Estamos allí porque compartimos una rebeldía y decimos ¡no! Y en estos tiempos que corren, cuando el autoritarismo y el fascismo incipiente están presentes, debemos estar unidos más que nunca. Recordemos que el rocanrol siempre ha sido rebeldía y que las ciudades se han convertido en prisiones, con tantas cámaras y vigilancia, advierte.

De regreso de la gira América Insurgents que llevó a Decibelios a tres ciudades de Estados Unidos y a Tijuana, Guanajuato, Guadalajara y Monterrey, la agrupación, surgida en tierras catalanas, permanecerá algunos días en la Ciudad de México para promover su disco Insurgents, titulado en alusión a la avenida Insurgentes de esta capital.

Diversidad de sonidos

Con sonidos tan diversos como el ska, oil y el punk, ahora incorporan más. Tiene por ahí escondidos cumbia, porro, ranchera. Estamos absorbiendo su cultura, dice Fray, refiriéndose a tierras americanas.

Vacaciones en el Prat, Sangre dorada, Camaleón y la que les dio la imagen de skinheads, Botas y tirantes, competirán con nuevas canciones como “Alambradas de dolor, que es un ska alegre con letra triste de protesta, referente a los millones de refugiados que hay en el mundo –aclara Fray–; luego está Sexo con saxo, que tiene un video muy hermoso, muy light para mi gusto, pero hermoso, y el tercer sencillo será Tambores de guerra, que es un homenaje a los antifascistas Maquis, quienes eran gente normal, pero sabían que iba a llegar por ellos y los mataban o los llevaban a campos de concentración; gente que se fue a la montaña a refugiarse.

El dictador ganó la guerra y muchos se fueron a luchar contra los fascistas junto con la resistencia francesa. Yo me cuadro, asevera el líder de Decibelios, que está formado, además de Fray, por Jaume, Ángel, Fran, Pau y Guillermo.