En Cruz Azul saben que al inicio del torneo daban una mala cara que incluso provocó rumores de una supuesta salida del estratega Pedro Caixinha, pero el delantero Édgar Méndez aseguró que han ido de menos a más y sostuvo que prefiero el momento que vivimos ahora al de la temporada pasada cuando marchaban con paso casi perfecto.

Después de perder la final ante el América, a los celestes les costó trabajo retomar el ritmo, las victorias no eran constantes y las críticas también mermaban en el ambiente del plantel. Eran tiempo difíciles, no era justo que se dijera que Pedro se iba, se vivió un momento de gran tensión.

El estrés era tan fuerte que en el duelo de la jornada nueve ante Necaxa el propio Méndez y Pablo Aguilar discutieron. Ese episodio fue clave para decir 'ya basta', reveló el ariete al aceptar que "la imagen que dábamos no era la correcta".

Poco a poco, Cruz Azul recuperó la confianza en la cancha y ahora se perfila para cerrar con fuerza la fase regular del certamen. Los altibajos terminaron y en contraste presumen una racha de ocho partidos sin perder, además escalaron al cuarto lugar con 26 unidades.

Méndez aseguró que avanzan con más tranquilidad después de que los equipos regiomontanos y el líder León han robado los reflectores en este semestre, pero saben que Cruz Azul es un equipo grande por lo que están obligados a vencer en las últimas dos jornadas para alcanzar la meta de 32 puntos.

El torneo pasado íbamos primero pero no teníamos buenas sensaciones, ahora no iniciamos bien y tenemos sensaciones positivas, dijo.

Pese al crecimiento que han tenido, Méndez consideró que haber perdido la final ante el América dejó sus secuelas, y como muestra ha sido la baja asistencia en los partidos. Sentimos que fallamos y es entendible, señaló, aunque esperan que sus seguidores se enganchen de nueva cuenta para acompañarlos en el estadio Azteca.

La Máquina intentará conservar su lugar entre los primeros cuatro de la tabla general cuando visite el domingo a Lobos BUAP, que tiene 20 puntos y se aferra a una leva posibilidad por llegar a la liguilla.