Londres. La salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE) se mantuvo este lunes en punto muerto, luego de que el Parlamento votó cuatro alternativas al acuerdo para el Brexit de la primera ministra Theresa May, pero no aprobó ninguna.

El panorama sigue siendo confuso tras una agitada semana en la que la estrategia de May para la separación de la UE fue rechazada por tercera ocasión, a pesar de que la primera ministra ofreció su renuncia.

El Parlamento sometió a votación este lunes cuatro opciones para concretar el Brexit, pero todas fueron rechazadas.

La moción que estuvo más cerca de alcanzar mayoría fue la que propone mantener a Reino Unido dentro de la zona aduanera de la UE, sin embargo, fue rechazada por apenas tres votos de diferencia.

La opción que más apoyos recabó –280 votos en favor por 292 en contra– fue la que solicita al gobierno de la conservadora May que, en caso de que el Parlamento apruebe un acuerdo de salida, éste tenga que ser ratificado por el pueblo británico en un referendo.

Steven Barclay, ministro británico para el Brexit, declaró al conocerse el desenlace de los votos indicativos (las cuatro opciones) que los parlamentarios aún tienen la oportunidad de evitar una salida abrupta el próximo 12 de abril, así como la participación en las elecciones al Parlamento Europeo de mayo, si respaldan esta semana el acuerdo de divorio sellado entre Londres y Bruselas.

El viernes pasado, la tercera derrota en el Parlamento dejó a May ante una creciente crisis sobre el Brexit, el mayor cambio de política de Reino Unido desde la Segunda Guerra Mundial.

Su gobierno y el Partido Conservador –que ha intentado evitar una escisión por la relación con Europa durante 30 años– están divididos entre quienes exigen que May dirija la separación del bloque y quienes quieren quedarse.

Si la primera ministra decide apoyar a cualquier bando, se arriesgaría a dividir a su partido y derribar al gobierno. Algunos conservadores han advertido que apoyarán una moción de censura si ella acepta los llamados para un Brexit que conserve muchos de los estrechos lazos económicos con la UE.

Aunque el avance de las propuestas de la Cámara de los Comunes es evidente, estas votaciones no son legalmente vinculantes, por lo que el gobierno no está obligado a adoptar los resultados.

En este contexto, ambientalistas se quitaron la ropa afuera del Parlamento mientras se desarrollaban las votaciones sobre el Brexit. Miembros del colectivo Extinction Rebellion (Rebelión contra la Extinción) sostuvieron que desnudándose nos ponemos en una situación inclemente para resaltar la vulnerabilidad que todos compartimos ante el derrumbe del medio ambiente y de la sociedad.

Los manifestantes presentaron esta protesta como apenas el aperitivo de las acciones que, aseguraron, colapsarán el centro de Londres a partir del 12 de abril, cuando acontezca el brextanic, en alusión al hundimiento del legendario barco y al caos que acarreará la salida de la UE.