Entender las legislaciones locales de cada una de las naciones que podrían afectar a la comunidad LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales) es materia a considerar para evitar cualquier vulnerabilidad de un representante de México en el extranjero, así como para entender los riesgos que viven connacionales en el exterior que pertenecen a este grupo, expone el recién ratificado cónsul en Miami, Jonathan Chait.

De acuerdo con información de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el Estado mexicano busca garantizar el respeto de los derechos humanos de sus nacionales; sin embargo, no se puede impedir la aplicación de las leyes internas de cada nación.

Por tanto, destaca la cancillería, es importante recordar que siempre debe observarse la ley del país en el que se esté, independientemente de estar de acuerdo o no con su contexto.

Advierte así que en algunos países la homosexualidad se puede tipificar como un delito, y las penas y castigos pueden ser severos o hasta implicar la pena de muerte.

El diplomático cuenta a La Jornada que dentro de su carrera en el Servicio Exterior Mexicano nunca sintió que hubiera un reto por su preferencia sexual. “Desde que ingresé al Servicio Exterior siempre había el apoyo… Hubo un movimiento interno que ayudó mucho a concientizar la igualdad y la equidad para las parejas del mismo sexo”, dijo.

Añadió que ello abrió espacio para muchos diplomáticos que continuaron haciendo carrera. Aún recuerdo hace unos años finalmente a las parejas del mismo sexo, a los cónyuges, les pedían ya el pasaporte diplomático, eso fue un avance enorme.

Expresó que la política de espacios de inclusión en la cancillería mexicana es coherente con los cambios que México ha hecho en todos los sentidos y consistente con la política de derechos humanos.

El cónsul de México en Miami, Florida, considera que la SRE ha ido a la vanguardia en el tema de la diversidad sexual y mucho han tenido que ver dos cosas: “los que van adelante y que han estado a nivel interno empujando los temas así como la coherencia con nuestras políticas… No tendría ningún sentido estar en los foros de derechos humanos cuando no todo mundo tiene los mismos derechos”.

Jonathan Chait reconoce que dentro de los grupos de connacionales vulnerables en el extranjero los de la comunidad LGBTI son los más expuestos y entre ellos, los transexuales se encuentran en una posición de mayor vulnerabilidad.

“Es algo de lo que tenemos que estar conscientes. Es importante ver que sus derechos humanos realmente sean respetados y es algo que se tiene que reconocer… Se está priorizando dentro de las acciones que tenemos que hacer en materia de protección, lo cual es ya una encomienda que está dentro de las nuevas guías”, dijo.

Sobre los diplomáticos que tienen un cónyuge –independientemente si es una pareja heterosexual o, como en su caso, del mismo sexo- es importante darle el lugar que le corresponde.

“En el caso particular mío, para mi pareja ha sido un aprendizaje y a partir de eso él generó un propio blog que se llama The Proud Diplomat (El Diplomático Orgulloso) en donde trata de intercambiar las experiencias, ya sea como diplomático o… de cómo vivir en otros países … Es reconocer que esto puede ser una oportunidad a nivel de pareja”, relata.