Adís Abeba. La compañía estatal Ethiopian Airlines anunció este lunes que fueron recuperadas las dos cajas negras del Boeing 737 Max 8 que se estrelló el domingo al sureste de la capital, con saldo de 157 muertos.

Desde primera hora de la mañana de este lunes, rescatistas de la Cruz Roja comenzaron la búsqueda de los restos de las víctimas y objetos personales esparcidos en el lugar del accidente, mientras la maquinaria pesada excavaba para recuperar las piezas del fuselaje dentro del enorme cráter que se formó en las inmediaciones del pueblo de Tulu Fara, 60 kilómetros al este de la capital etíope.

Durante los trabajos de rescate fueron hallados los dos dispositivos que registran los datos de vuelo y toda la comunicación de la cabina de pilotaje, mientras el país vivía una jornada de luto.

Un funcionario de la aerolínea reveló a la agencia de noticias Ap que una de las cajas negras está parcialmente dañada, pero ya veremos qué podemos recuperar, añadió.

Las autoridades etíopes encabezan la pesquisa asistida por Estados Unidos y Kenia para determinar el motivo la tragedia de la aeronave que despegó de Adís Abeba con destino a Nairobi. Forenses de Israel llegaron a la zona del desastre para auxiliar. Aclarar las causas de accidentes como éste lleva tiempo, aseguró el ministro keniano de Transporte, James Macharia.

De acuerdo con la aerolínea, los datos del radar de vuelo muestran que el aparato, de reciente adquisición, ascendía erráticamente con una velocidad vertical inestable y no existían malas condiciones climatológicas para el vuelo.

A raíz de la catástrofe, la estatal Ethiopian Airlines decidió suspender la actividad de otros cuatro Boeing 737 Max 8 hasta nuevo aviso. Otras compañías del mundo decidieron hacer lo mismo, mientras los pilotos de Aerolíneas Argentinas se negaron a maniobrarlos.

Las autoridades confirmaron la identificación de varias nacionalidades entre las víctimas; en particular se trataba de 32 kenianos, 18 canadienses, ocho chinos, ocho estadunidenses, siete británicos, siete franceses, seis egipcios, cinco holandeses, cuatro indios, cuatro personas con pasaporte diplomático de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) cuya procedencia está por aclararse, cuatro eslovacos, tres austriacos, tres rusos, dos españoles, dos marroquíes, dos polacos, dos israelíes, así como la ciudadana mexicana Graziella de Louis Ponce, originaria de Mérida, Yucatán, y traductora de la ONU, quien viajaba con otros colegas a una conferencia sobre medio ambiente en Nairobi, informó CNN.

En el Centro de Conferencias de la ONU en Adís Abeba se rindió un homenaje a los 19 elementos de su personal fallecidos. Este es un día muy triste, dijo Vera Songwe, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para África, organismo que ondeó su bandera a media asta.