El fentanilo se ha convertido en la droga más letal en Estados Unidos y, si bien en China se produce la mayor parte de este opiáceo sintético y sus precursores, México se está convirtiendo en importante punto de tránsito y producción del estupefaciente, concluyeron investigadores del Instituto México del Centro Woodrow Wilson y la fundación Insight Crime.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Estados Unidos estiman que en 2017 unas 70 mil 273 personas murieron por sobredosis de drogas en ese país. De esta cifra, en 28 mil 466 de los casos estuvo involucrado el fentanilo o un narcótico sintético similar. Ello representó un aumento de 45 por ciento en comparación con 2016.

Debido a la naturaleza altamente concentrada de esta droga, se puede transportar fácilmente en pequeñas cantidades y es capaz de tener un impacto devastador en la salud pública, expone el estudio El rol de México en el ascenso mortal del fentanilo.

El documento reporta que China produce casi la totalidad de la sustancia y su papel en el suministro de la mayoría de los opioides sintéticos al mercado estadunidense se vincula directamente con sus vastas industrias farmacéuticas y químicas mal reguladas.

Refiere que México es un punto de tránsito y producción en crecimiento para esta droga con la mayor parte del producto que ingresa por los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas.

Por otro lado, varios casos de incautaciones de fentanilo, principalmente en Tijuana, sugieren que los grupos criminales mexicanos usan cada vez más las rutas aéreas, mediante servicios de paquetería para transportar el producto desde Sinaloa y la Ciudad de México, por ejemplo, hacia aeropuertos cercanos a la frontera ­estadunidense.

Organizaciones criminales mexicanas parecen gestionar el procesamiento, almacenamiento y envío de esta droga al país vecino, aunque se estima que dos en particular, el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el cártel de Sinaloa, controlan el transporte hacia Estados Unidos.

Los investigadores contratados en Estados Unidos, Mexico y Colombia por Insight Crime para el reporte refieren que no está claro cuánto se consume de esta droga de origen mexicano en la nación vecina y cuánto llega directamente de China y cuánto desde México.

Indican que México aún no considera que el fentanilo sea un tema importante y no ha dedicado recursos significativos a la búsqueda de los principales impulsores del comercio dentro de sus fronteras.

Duncan Wood, director del Instituto México del Centro Woodrow Wilson, advirtió que la cooperación bilateral contra este narcótico no ha seguido el ritmo explosivo del mercado de esta droga.

Wood consideró vital que México y Washington diseñen la estrategia de lucha contra el fentanilo para desarrollar medios efectivos para abordar el problema en ambos países.