Elementos del Ejército mexicano y de las policías Federal y estatal de Morelos, asumieron este sábado las tareas de seguridad pública en los municipios de Cuernavaca, Yautepec y Jiutepec, así como en la capital de Zacatecas y la alcaldía de Guadalupe en este mismo estado, consideradas con altos índices delictivos en años recientes, por lo que realizaron una revisión al personal policiaco, armas de fuego, municiones y equipo de estas localidades.

Las medidas instauradas por el gobierno federal pretenden que tanto militares como policías federales y estatales trabajen en conjunto para realizar los patrullajes y la vigilancia en zonas conflictivas, atiendan las denuncias ciudadanas y realicen detenciones a fin de establecer la paz, mantener el orden público y recuperar el bienestar social.

La intervención de las fuerzas militares, federales y estatales en Cuernavaca, Yautepec y Jiutepec se da debido a presuntos actos de criminalidad o corrupción dentro de las policías locales, informó en un comunicado el gobierno de Morelos.

José Luis Ortiz Guarneros, titular de la Comisión Estatal de Seguridad (CES), afirmó que el control en las comandancias morelenses comenzó a las siete horas del sábado, con base en las atribuciones que le confiere el reglamento de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos para que personal castrense realice una revisión extraordinaria al armamento, municiones y a los elementos inscritos en la licencia de portación colectiva de armas de fuego.

Se fortalecerá a policías

Ortiz Guarneros aseguró que se mantendrá comunicación con la población en todo momento a través de los números de emergencia 911 y de denuncia anónima 089. El objetivo de llevar a cabo estas actividades de supervisión es fortalecer a las policías de estos municipios y ofrecer a la población fuerzas de seguridad confiables, precisó el mando policiaco.

A comienzos de diciembre el comandante de la 24 Zona Militar en Morelos, Armado Gómez Mendoza, informó que los elementos que integren la Guardia Nacional –la cual se prevé será avalada por el Congreso federal a mediados de enero–, estarán bajo mando militar, operarán desde instalaciones castrenses con mil 800 militares, 70 de la CES y 30 de la Policía Federal.

Detalló que al primer grupo que integrará a ese nuevo cuerpo de seguridad se le asignarán cinco municipios: Cuernavaca, Jiutepec, Cuautla, Yautepec y Jojutla, los cuales registran alta incidencia delictiva. Reiteró que los demás elementos de la 24 Zona Militar, así como los policías de la CES y federales seguirán atendiendo el resto de la entidad.

En aquella ocasión, Gómez Mendoza reconoció que el mando de la Guardia Nacional lo tendrá la institución castrense y agregó que ahora buscamos que sea un equipo de trabajo, los policías y militares se conozcan, trabajen juntos, coman juntos y duerman juntos, dijo.

Comentó que afinan una estrategia para atender la seguridad de los morelenses, consistente en realizar encuestas en los lugares más conflictivos para que operen los elementos de la Guardia Nacional. “Vamos a meter a la gente donde corresponda, en los lugares, horas y días más conflictivos (…) para administrar en forma correcta nuestro capital humano y nuestros recursos materiales”, aseguró.

Anoche, en el bar La Pecera, de Cuernavaca, Morelos, ocurrió una balacera con saldo de un hombre muerto y uno herido. De acuerdo con cifras del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública en Morelos se han registrado de enero a noviembre de 2018, 626 homicidios dolosos y 281 culposos. Además, se han contabilizado 22 feminicidios y 38 secuestros.

Guardias comunitarias en 26 pueblos de 12 municipios

En julio pasado, por los altos niveles de inseguridad en el estado de Morelos surgieron guardias comunitarias en 26 comunidades de 12 municipios. Los líderes de ese movimiento aseguraron que ante la estrategia ‘‘fallida’’ del Mando Único, el ‘‘hartazgo social’’ y el ‘‘vacío de autoridad’’ generado cuando aún era gobernador Graco Ramírez (2012-2018), decidieron crear una organización para proteger a sus comunidades de los grupos del crimen organizado.

Incluso el 31 de julio anterior, una turba mató a golpes a un colombiano identificado como Ricardo Alonso Lozano, quien al parecer formaba parte de una banda de extorsionadores que operaba en Cuautla y la zona alta de Morelos. Los pobladores culparon al ex mandatario Graco Ramírez de omisión por este homicidio. Sin embargo, los asesinatos no han parado con la administración de Cuauhtémoc Blanco y suman 200 de octubre a la fecha.

En tanto, la vocería de la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas informó que las acciones militares de vigilancia en esta entidad comenzaron el miércoles 26 de diciembre en las ciudades de Zacatecas y Guadalupe, consistentes en establecer puntos de revisión en los principales accesos a las áreas urbanas y patrullajes.

Aseguró que en las actividades que realizarán los efectivos militares para proteger a la población se observará en todo momento “el respeto irrestricto de los derechos humanos; por lo que se invita a la ciudadanía a denunciar cualquier abuso por dichas autoridades.

El mando castrense solicitó la colaboración de la ciudadanía para que de manera anónima y confidencial denuncien cualquier acto delictivo que permita a las autoridades actuar de manera oportuna y eficaz contra quienes infrinjan la ley, para lo cual pone a su disposición los siguientes medios de denuncia: teléfono 018005076081 y correo: [email protected]. Agregó que además las denuncias podrán realizarse en los números telefónicos 911 y 089 que opera en el gobierno de Zacatecas.

Sobre la violencia en esta entidad, las autoridades estatales la atribuyen a la pugna entre cinco organizaciones criminales que buscan el control de esta plaza: cárteles Jalisco Nueva Generación; de Sinaloa; Del Golfo, Del Noreste y Los Zetas, de la facción regional conocida como Talibanes.

Zacatecas: 900 ejecuciones

Esos grupos serían responsables de que en este año, en el estado de Zacatecas, se hayan registrado más de 900 ejecuciones, alrededor de 40 secuestros y al menos medio centenar de desapariciones forzadas, que en el argot policiaco son conocidas como levantones.

En este año murieron abatidos en distintos hechos 11 policías municipales y estatales. Aunado a ello, cuatro comandancias de seguridad pública fueron rafagueadas con armas de alto calibre por presuntos integrantes del crimen organizado en los municipios de Juan Aldama, Morelos, Miguel Auza y Cañitas de Felipe Pescador. Por lo anterior, la Secretaría de Seguridad Pública federal consideró focos rojos, por su alta incidencia delictiva, las cinco regiones en que se dividió al estado de Zacatecas para el combate a las organizaciones criminales.