Los productores de leche de México terminarán 2018 con pérdidas equivalentes a 700 millones de dólares por vender ésta a un menor precio de su costo de elaboración y debido a inequidades en el comercio internacional, señaló ayer el Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche.

El representante del sector, Álvaro González, indicó en un balance preliminar que en los pasados seis años la situación se complicó también por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Sólo en 2018, por efecto del TLCAN, los productores absorbimos un alto quebranto económico equivalente a 14 mil millones de pesos por recibir 1.5 pesos menos (por litro) que el costo de producción, indicó en un comunicado.

La industria de derivados lácteos también se ha enriquecido a costa de los pequeños y medianos productores, agregó.

Según datos de la agrupación, que cita fuentes oficiales, las importaciones de leche en polvo sin crema pasaron de 205 mil a 340 mil toneladas, nivel histórico para este rubro.

Expresó que, por ello, para los pequeños y medianos productores es conveniente que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador reactive la actividad agropecuaria, como lo ha propuesto.

Necesitamos un intercambio comercial equitativo. A los productores la industria les paga poco y a los consumidores les vende caro, subrayó González.

Según datos de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche, México exporta a Estados Unidos y Centroamérica al menos mil millones de litros equivalentes de productos lácteos.

México importa 15 mil millones de litros en lácteos, de los cuales 70 por ciento proviene de Estados Unidos mediante productos como leche en polvo y quesos.