Sábado 22 de diciembre de 2018, p. 22
Ginebra. Relatores de derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) instaron este viernes al gobierno de Gran Bretaña, a que, en el cumplimiento de sus obligaciones internacionales, permita a Julian Assange, fundador del portal Wikileaks, salir de la embajada de Ecuador en Londres –donde lleva más de seis años– sin ser detenido o extraditado a Estados Unidos.
El Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la ONU reiteró que Assange se encuentra privado de la libertad de forma arbitraria e ilegal en la embajada, tal como constató en febrero de 2016. Inicialmente el australiano pidió asilo allí para evitar ser extraditado a Suecia, donde las autoridades querían interrogarlo para un caso de agresión sexual.
Assange, de nacionalidad australiana, negó las acusaciones y dijo que el cargo era una estrategia para trasladarlo a Estados Unidos, donde fiscales preparan un proceso penal en su contra por publicar miles de documentos clasificados del gobierno estadunidense en Wikileaks. La autoridades del país nórdico finalmente archivaron el caso.
El gobierno británico afirmó que Assange será arrestado por no pagar una fianza si abandona la embajada, aunque cualquier sentencia no excedería los seis meses si se lo declara culpable. Ante ello, el hacker no ha podido abandonar la legación porque Reino Unido considera que, al entrar en el recinto, él incumplió la medida de libertad provisional que se le había concedido.
Es hora de que el señor Assange, quien ya pagó un alto precio por ejercer pacíficamente sus derechos a la libertad de opinión, expresión e información, y para promover el derecho a la verdad para el interés público, recupere su libertad
, argumentaron los expertos de la ONU.
En octubre pasado el gobierno de Ecuador impuso nuevas reglas a Assange, entre ellas que pague sus facturas de salud y telefónicas. El australiano demandó, pero la justicia rechazó en última instancia la petición.