Coatzacoalcos, Ver., Empresarios, activistas y otros ciudadanos salieron ayer a las calles para protestar por la inseguridad en esta ciudad portuaria, donde en 2018 se han cometido al menos 49 secuestros, según cifras oficiales, y más de 100 según datos extraoficiales, y los comerciantes son víctimas de extorsiones casi a diario.

Los manifestantes criticaron la inoperancia y las estrategias fallidas de las autoridades municipales y estatales, así como su indolencia e indiferencia ante la criminalidad, que ha ido en aumento en años recientes, pese a la presencia de fuerzas federales; no obstante, demandaron el envío de más militares.

Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a noviembre de 2018 se perpetraron en este municipio 143 homicidios dolosos, 50 por ciento más que en el mismo periodo de 2017.

Los inconformes señalaron que al menos 300 familias han huido de esta localidad del sur del estado (incluida en el programa de Zonas Económicas Especiales).

Eduardo Campos, presidente de la Cámara Nacional de Comercio en el municipio, dijo que han cerrado numerosos negocios debido a que casi a diario son extorsionados por grupos delictivos.

Es muy triste saber que familias que llevan más de 50 años en la zona de un día para otro huyen de sus casas por miedo a ser asesinadas, mencionó.

Apenas el miércoles tres sujetos armados irrumpieron en el restaurante La Bahía, asaltaron a los clientes y secuestraron a uno.

En protesta y con la consigna “Coatza quiere paz”, este jueves los empresarios cerraron sus negocios de las nueve a las 11 de la mañana y se apostaron en la explanada del ayuntamiento, desde donde enviaron un mensaje al presidente, Andrés Manuel López Obrador; al gobernador, Cuitláhuac García, y al presidente municipal, Víctor Carranza.

Coatzacoalcos confía en ustedes y exige encontrar la solución a los graves problemas de inseguridad que estamos viviendo. Creemos en el Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024. Queremos creer. Por favor, no nos defrauden, dijo uno de los manifestantes con un altavoz.

Continuó: “Hace varios años nuestra ciudad comenzó a verse afectada en lo económico, lo social, lo moral y debido a hechos delictivos que, de ser algo esporádico, se convirtieron en algo que se vive día con día.

Hemos perdido la capacidad de asombro y la tranquilidad por delitos que van desde el robo a transeúnte y negocios hasta los homicidios dolosos, cada vez más cruentos, el secuestro y la extorsión presencial.

Coatzacoalcos tiene el índice de secuestros más alto del estado. Los últimos días de noviembre fue privado de la libertad José Antonio Wilburn González, ex presidente del Consejo Coordinador Empresarial en la zona sur, y hace unos días, un menor de edad fue arrancado de los brazos de su madre cuando lo llevaba a la escuela.

“Estamos hartos de la impunidad y la corrupción, hartos de la inoperancia de las corporaciones encargadas de la seguridad pública, de la procuración e impartición de justicia. Estamos hartos de no poder confiar.

¿Qué tiene que ocurrir para que el gobierno federal y el estatal hagan algo por Coatzacoalcos, para exigir a las autoridad municipal que asuma su responsabilidad constitucional en seguridad pública y se preocupe por los ciudadanos? ¿Cuántos delincuentes dominan a los 350 mil coatzacoalqueños?, preguntó.

Los manifestantes advirtieron que esta protesta es un golpe en la mesa para dar un golpe de timón en la estrategia de seguridad y prevenir los delitos.

El edil Víctor Carranza acudió a la explanada y escuchó los reclamos. Vamos a atenderlos con mucho gusto. Buscaremos una buena alternativa, dijo.

Sólo esta semana fueron secuestrados dos empresarios y una trabajadora petrolera, quienes fueron sacados de restaurantes o tiendas.