Viernes 16 de noviembre de 2018, p. 5
Madrid. El escritor nicaragüense Sergio Ramírez, Premio Cervantes de Literatura 2017, lamentó la muerte de su par mexicano Fernando del Paso Morante y sostuvo que es una ‘‘pérdida inmensa para la lengua” castellana que ‘‘llena de duelo a todas las letras hispanoamericanas”.
Antes de dar a conocer el nombre del ganador del Premio Cervantes de este año, que recayó en la poeta uruguaya Ida Vitale, los integrantes del jurado del prestigioso galardón decidieron rendir ‘‘un emocionado recuerdo” para Del Paso.
El deceso del narrador provocó un inmenso pesar en el mundo de la letras en España, que verbalizó el ministro de Cultura en representación de la Real Academia Española (RAE) y de escritores y catedráticos. En el jurado estaba precisamente Sergio Ramírez y el novelista español que fue reconocido con el galardón hace dos años, el catalán Eduardo Mendoza.
José Guirao, ministro de Cultura de España, dedicó las primeras palabras de la rueda de prensa al autor de José Trigo, Palinuro de México y Noticias del Imperio. ‘‘Los miembros del jurado del Premio Cervantes decidimos que antes de dar a conocer el nombre del ganador de este año queríamos tener un emocionado recuerdo para Fernando del Paso, que falleció el día de ayer. Nos sumamos todos a la tristeza que nos produce su pérdida para las letras en español”.
Sergio Ramírez explicó a La Jornada que la muerte de Fernando del Paso es un duelo para todas las letras hispanoamericanas. Y para mí, en lo personal porque éramos amigos. Su salud estaba muy deteriorada. Me parece que fue noticia que pudiera recibir el Premio Cervantes en 2015 después de haber sufrido una grave enfermedad
.
Ramírez añadió que “Fernando del Paso representa una de las voces más singulares de la narrativa hispanoamericana, sobre todo porque fue un novelista que cultivó la experimentación verbal llevando las palabras hasta el límite. Desde José Trigo, su primera novela y muy experimental en el lenguaje, hasta Palinuro de México y Noticias del Imperio, que es una de las grandes novelas de Hispanoamérica, no sólo por su lenguaje sino por la aventura estructural que tiene, compuesta de monólogos y narraciones en primera y en tercera personas. De manera que su muerte es una pérdida inmensa para la lengua”.
Crisis en Nicaragua inhibe su quehacer literario
Sergio Ramírez reconoció que en el último año ha vivido más pendiente de ver el desarrollo de la situación política de Nicaragua, que ha sido y es lo que más le inquieta en estos momentos. De hecho, reconoció que ha tenido que interrumpir sus labores cotidianas, su escritura, porque asiste con preocupación y perplejidad a la deriva represiva del gobierno del que fue su compañero de movimiento en los años 80, Daniel Ortega.
‘‘En cuanto a mi trabajo literario, pues yo tengo que convivir con la situación de mi país, que sigue siendo crítica. Y es tan crítica que no deja de distraer mi trabajo literario a mi pesar. Pero voy retomándolo en la medida en la que las circunstancias me lo van permitiendo”, explicó Ramírez, que reconoció que lo de Nicaragua tiene difícil solución
.