Un grupo de vagoneros (vendedores ambulantes dentro de los trenes del Metro) exigió que sea regularizada su actividad.

En la actualidad, alrededor de 10 mil personas ejercen esta labor de manera irregular en los vagones del Metro, en todos los horarios en que opera el Sistema de Transporte Colectivo; es decir, de lunes a viernes de 5 a cero horas, los sábados de 6 a cero horas, y los domingos de 7 a cero horas.

Los argumentos que las autoridades esgrimen para no permitirnos realizar esta actividad es que el comercio informal es delincuencia, que estorbamos, que cortamos el libre tránsito, cuando no es así porque nosotros subimos y bajamos con el flujo de la gente; por tanto no es un argumento válido, consideraron en una conferencia de prensa en la que videograbaron a los reporteros.

Respecto de por qué venden en el Metro, añadieron que por necesidad y porque es la forma más fácil.

Álan Alexis Álvarez Carrera, secretario de prensa de la Federación de Comercio Popular y Prestadores de Servicios, convocante de la conferencia, agregó: Simplemente, porque estamos dentro del porcentaje de la economía informal; entonces, así nos vayamos a otro lugar a ejercer esta actividad va a ser exactamente lo mismo.

Al mismo tiempo, exigió que se les construyan plazas mixtas, corredores comerciales, espacios que se adecuen dentro y fuera de las estaciones del Metro.

Añadió que por décadas el comercio dentro de las instalaciones del Metro ha existido de manera clandestina; esto no es porque las personas que desarrollan esta actividad en este lugar así lo hayamos decidido; obedece a que se han implementado leyes y reglamentos que no se ajustan en nada a la realidad económica y laboral que vive el país.

Consideró que, por el contrario, dichos reglamentos violan de forma grave las garantías constitucionales, así como los derechos humanos, al trabajo, al libre tránsito y a la libre expresión, lo que genera corrupción en todos los niveles policiacos y de gobierno involucrados en este sector”.

Los líderes de la citada federación hicieron un llamado a los gobiernos local y federal “a buscar de manera urgente los mecanismos adecuados para instaurar o legislar una ley que regule y legalice esta actividad, no sólo dentro de los vagones, sino en todos los espacios públicos.