Barranquilla. El beisbol mexicano tuvo su día de felicidad en Colombia, después de que el tricolor Sub 23 derrotó 2 a 1 en un juego de 10 entrada a los campeones defensores, Japón, que hasta ayer se mantuvieron invictos. Un doblete remolcador de Fabricio Macías en la décima entrada rompió el que se extendió como cerrado duelo de lanzadores en la tercera edición de la Copa Mundial de Beisbol Sub 23. El trabajo de los tricolores Carlos Morales y Rafael Ordaz, con el salvamento de Erick Casillas, pudo defender sin carreras y con casa llena en el cierre del partido. En México sabemos ganar y perder, dijo el entrenador Enrique Reyes; “somos gente humilde que hemos trabajado duro para crecer; lo vamos haciendo en el beisbol tricolor y podemos competir ante cualquier selección”. Morales estuvo en estado de gracia durante ocho entradas en el montículo, donde sólo aceptó un hit, sin bases por bolas, y ponchó a seis japoneses.