Viernes 26 de octubre de 2018, p. 12
Miguel Ángel Osorio Chong, ex secretario de Gobernación, dijo que México debe dar un trato humanitario a los integrantes de la Caravana Migrante, recibirlos, cuidarlos, pero luego ver hacia adelante, para evitar un problema mayor, ya que cada año cruzan por territorio nacional 400 mil centroamericanos con rumbo a Estados Unidos y muchos de ellos son atacados por la delincuencia organizada.
Se debe atender la emergencia, velar por sus derechos humanos, poner como eje la dignidad de los migrantes y al mismo tiempo anticiparse a lo que pueda ocurrir en el supuesto, bastante probable
, de que los integrantes de la Caravana Migrante no puedan ingresar a territorio estadunidense, recalcó el también coordinador de la bancada del PRI en el Senado.
Expuso que no sería la primera vez, ya que en 2016 y 2017 un contingente de haitianos no pudo solicitar refugio en Estados Unidos por el cambio de política migratoria al asumir Donald Trump la presidencia de esa nación, y ello supuso un reto humanitario importante para las comunidades de acogida en la frontera norte, especialmente en Tijuana y Mexicali.
En aquel entonces, si mal no recuerdo, eran alrededor de mil haitianos que no pudieron cruzar la frontera. En este caso estamos hablando de que podrían ser más de 5 mil, principalmente hondureños
.
El senador Osorio Chong hizo notar que ello implica un desafío considerable para los tres órdenes de gobierno y la sociedad, ya que requiere asignaciones presupuestales y ampliar las capacidades institucionales con mayor personal y recursos materiales para atender tanto la coyuntura del tránsito de la caravana como las alternativas de regularización migratoria en algunos casos.
El actual, consideró, es un hecho inédito, ya que haya sido por engaño de algún líder criminal en Honduras que dijo que iba a haber visas humanitarias expedidas por México para recibirlos, o porque decidieron organizarse por las circunstancias adversas que tienen en su país, se trata de un grupo numeroso
.
El número de extranjeros que están de forma ilegal en el país creció durante el actual sexenio en 70 por ciento respecto del anterior, al pasar de 460 mil a 780 mil, detalló.
Asimismo, las solicitudes de refugio que en 2003 fueron mil 300, se estima que en este 2018 llegarán a 24 mil, y en el caso de niños y adolescentes se triplicó, al crecer de 35 mil a 150 mil. Ello exige más recursos para atender los procesos, precisó.
No debe perderse de vista, insistió, en que el reto para México en materia migratoria es doble, ya que ha aumentado el flujo de connacionales que deciden regresar voluntariamente al país o son repatriados –800 mil desde 2014 a la fecha–, a quienes se brinda apoyo para regresar a sus lugares de origen y opciones laborales.