Ayutla de los Libres, Gro., César Flores Maldonado, asesor externo del gobernador Héctor Astudillo Flores, provocó división al intervenir en la clausura de la celebración de 23 años de fundación de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), en Ayutla de los Libres.

A Flores Maldonado se le responsabiliza de los ataques perpetrados el pasado 7 de enero por la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg) contra el comité de enlace de la CRAC-PC de los bienes comunales de Cacahuatepec, en el poblado La Concepción, municipio de Acapulco.

Esas agresiones derivaron en la muerte de 11 personas, entre ellas cinco policías comunitarios, y la aprehensión de 19 de ellos, incluidos los hermanos Marco Antonio y Vicente Suástegui, dirigentes del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecop), hoy recluidos en el penal de Acapulco.

Desde que el presentador mencionó a César Flores como parte del presídium se escucharon chiflidos y gritos para exigir que se fuera. Previamente, Juan García Fidencia, coordinador de la Casa de Justicia de El Paraíso, pidió a los asistentes respeto a los enviados del gobierno estatal, y los asistentes también protestaron.

Cuando César Flores tomó el micrófono se escucharon los gritos ‘‘¡Ni Marcos preso, ni presa La Parota!’’ y ‘‘¡Fuera, fuera!’’. García Fidencia clausuró el acto pidiendo ‘‘un aplauso para la CRAC’’.

–¿No es una provocación del gobierno venir a un acto de la CRAC? –se le preguntó a propósito de su apoyo a la Upoeg, surgida de una escisión de la CRAC-PC.

–Todos los años nos invitan. Yo no trabajo en el gobierno. Yo vengo a representar al gobernador. Nuestra función es venir y escuchar, nada más.

El consejero de la CRAC, Valentín Hernández, se deslindó de la presencia del funcionario: ‘‘Vemos oportunismo de los personeros del gobierno, y un error de los compañeros que organizaron el acto y la marcha por los 23 años de la CRAC’’.

Mencionó que en la celebración, efectuada el domingo, ‘‘no se instalaron todas las mesas de trabajo. Entendemos que las casas de justicia de San Luis Acatlán y de Ayutla de los Libres debieron coordinarse para organizar la discusión de temas como los presos políticos, la reforma a la ley 701 y la consolidación del reglamento interno, pero al final no hubo acuerdos’’.