Morelia, Mich., Policías municipales de Morelia trataron en forma brutal a una mujer que conducía en estado de ebriedad y luego chocó contra una barda en el poniente de la ciudad, denunció la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).

Agregó que el anterior es sólo un ejemplo de por qué en este año el organismo ha recibido 14 quejas contra la corporación policiaca y 136 contra elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán.

La CEDH investiga a los uniformados, después de que en las redes sociales circuló una videograbación en la que se observa a agentes municipales que bajan de forma violenta de su coche a la mujer y la tiran al suelo. Ella trata de incorporarse, pero los policías la empujan para que vuelva a caer.

La agresión se cometió la madrugada del 11 de octubre, cuando los patrulleros detectaron una camioneta conducida por una mujer de manera anormal, le marcaron el alto y la conductora se dio a la fuga en el libramiento hacia el poniente de Morelia; al llegar a la avenida Mártires de la Plaza, perdió el control y chocó contra un inmueble; en ese sitio se exhibió el uso excesivo de la fuerza pública.

Otro caso ocurrió el pasado 8 de agosto en el municipio de Jungapeo, al oriente del estado, donde elementos de la policía de Michoacán llegaron a un domicilio en busca de un presunto delincuente; pero en la vivienda sólo estaba una mujer con sus dos hijas, de siete y 15 años, quien les abrió la puerta ante las amenazas.

Los uniformados revolvieron las cosas y cuando la adulta pidió una explicación la golpearon, y también a la adolescente que trató de impedir el abuso policiaco. La señora debió ser hospitalizada debido a la golpiza.

Los agentes interrogaron a la joven para que dijera dónde estaba su esposo. Ella respondió que no estaba casada. En su revisión, los uniformados se llevaron dinero que el hermano de la señora les envió desde Estados Unidos. Además amenazaron con regresar.

Cuando llegó el esposo de la lesionada, observó su casa destrozada y a su mujer e hija golpeadas; el organismo refirió que a la menor intentaron llevársela detenida. Su esposa estaba tirada en su parcela, la trasladó a una clínica privada de Zitácuaro, y por las gravedad de sus lesiones perdió parte del intestino.

El padre de familia presentó la denuncia con el número de expediente ZIT/112/01147/2018. El jefe de los policías está identificado.