El gobierno de Enrique Peña Nieto fue de claroscuros en materia de transparencia y lucha contra la corrupción, porque si bien impulsó leyes y modificaciones constitucionales importantes, muchas de ellas quedaron inconclusas, como lo demuestra el caso del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), afirmó María Patricia Kurzcyn Villalobos, comisionada del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).

En entrevista con La Jornada, la funcionaria subrayó que el combate a la corrupción en el nuevo gobierno no puede ser tarea de una sola persona. Consideró que los planes de austeridad de Andrés Manuel López Obrador deben aplicarse sin obstaculizar la eficiencia de los organismos del gobierno ni propiciar que los cuadros más capacitados renuncien para no ver mermados sus recursos.

Para Kurzcyn, el gobierno saliente tuvo logros importantes en el ámbito de la transparencia, como la ampliación de facultades del Inai para conocer información pública no sólo de los distintos niveles de gobierno, sino también de fideicomisos, universidades, sindicatos, personas físicas y morales que reciban recursos públicos.

Otro acierto fue promover leyes anticorrupción, de transparencia y de protección de datos personales que hablan de una política de muy buenas intenciones, pero hay que reconocer que nos dejó a la mitad en diversos aspectos, como lo prueba el hecho de que el SNA sigue sin tener a los 18 magistrados especializados del Tribunal Federal de Justicia Administrativa ni al fiscal especial anticorrupción.

“Lo que en lo personal haya ocurrido, si existe la Casa Blanca, si hay favoritismo para los amigos, está más enfocado hacia una actitud personal más que de gobierno, aunque las mezcla, porque es el Presidente”, señaló.

Al preguntarle cómo debe combatir la corrupción el próximo gobierno, Kurzcyn enfatizó que este trabajo no debe ser visto como la labor personal de un funcionario o de un gobierno, sino como una obligación de la sociedad en su conjunto, en la que es necesario investigar los actos donde se presuma un ilícito, sin violar el derecho a la protección de datos personales.

Acerca del plan de austeridad anunciado por López Obrador, la comisionada afirmó que el Inai ya está analizando de qué forma puede generar algunos ahorros, aunque subrayó que no sería deseable que a causa de ello se vea afectada la eficiencia de la labor del órgano garante, o incluso que el personal más capacitado decida renunciar.

Los planes de austeridad se deben poner en práctica hasta el punto en que no dificulten el ejercicio de las actividades con eficiencia. A veces éstas ocurren con derroche y eso hay que evitarlo, puntualizó.

Por otra parte, Kurzcyn consideró que la cultura de la transparencia ha tenido logros encomiables en México, a pesar de que persisten resistencias en diversos organismos de gobierno. Asimismo, destacó que los partidos políticos y los sindicatos tienen un buen nivel de cumplimiento de sus obligaciones de entregar información pública.